Este sábado, Magdalena, la tercera hija de los Reyes Carlos Gustavo y Silvia de Suecia, se casa con el financiero estadounidense Chris O'Neill. Es el gran día de uno de esos cuentos de hadas en los que, naturalmente, siempre hay un castillo. Los palacios reales suecos son un lujo del que presume el país, rodeados de inmensos jardines, y además una interesantísima ruta turística en la que descubrir la historia de la familia.

Tanto el Palacio Real (Kungliga Slottet), en el centro de Estocolmo, como los palacios de Drottningholm (Drottningholms Slott), cerca de la capital, y Solliden (Sollidens Slott), en la isla báltica de Öland, son un exquisito escaparate de la manera en que la monarquía sueca vive, trabaja y celebra sus vacaciones.

En realidad, se puede plantear la visita de al menos diez palacios reales, llenos de estancias, museos, capillas y arte que recuerdan cuatro siglos de historia. Muchos de ellos se hallan en la capital, en los alrededores y junto al lago Mälaren.

El Palacio Real es un edificio de estilo barroco obra del arquitecto Nicodemus Tessin «el joven» que se alza en la isla de Gamla Stan, rodeado de calles con su adoquinado original, de edificios protegidos. Son más de 600 habitaciones repartidas por 7 plantas, y es la residencia oficial de los Reyes (la residencia privada es el Palacio de Drottningholm), y escenario de las recepciones oficiales. En su interior, nos esperan los aposentos reales, la Tesorería Nacional y el Museo Tre Kronor, donde podremos contemplar una gran colección de coronas, joyas, vestimentas. Y la Capilla Real que también puede visitarse. No hay que perderse el cambio de la guardia, a las 12:15 entre semana y sábados y a las 13:15 los domingos.

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En el palacio de Drottningholm, lugar donde nació Magdalena de Suecia, se celebra el banquete de esta boda. Drottningholms Slott y sus terrenos, en las afueras de Estocolmo, están reconocidos por la Unesco como sitio patrimonio de la humanidad. Una excursión de un día a Drottningholm siempre es una gran idea: es un palacio excelentemente conservado (la construcción original data de finales del XVI). Hay que ver el Pabellón Chino y los magníficos jardines. Las habitaciones en el ala sur del palacio son residencia privada de la Casa Real. El resto del palacio y los jardines están abiertos al público todo el año. Cerrado (por la boda, naturalmente) del 4 al 11 de junio.

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Nos vamos a las orillas del lago Mälaren (o Mälar), en las cercanías de Mariefred, un pueblo de menos de 4.000 habitantes. Nos separan unos 70 kilómetros de Estocolomo. Es este un lugar romántico, de paz idílica. En el siglo XIV fue una fortaleza, hasta que las tierras fueron reclamadas por la Familia Real. El castillo actual fue construido bajo la supervisión de Gustavo I de Suecia en 1537. Hoy, se pueden recorrer sus habitaciones y pasadizos, ver la Colección Nacional de Retratos de Suecia.

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El palacio en el que hoy vive Victoria de Suecia fue construido en 1802 a partir del diseño del arquitecto Carl Christoffer Gjörwell, encargado por Gustavo IV Adolfo de Suecia. Gjörwell ya había trabajado en Haga durante la época de Gustavo III, como ayudante de arquitecto favorito del rey, Louis Jean Desprez. El nuevo palacio fue construido justo al norte del Pabellón de Gustavo III, y fue llamado finalmente Pabellón de la Reina.

Ya en el siglo XX, el palacio fue modernizado, lo que le aportó un toque contemporáneo adecuado a las nuevas necesidades. Posteriormente funcionó como residencia de invitados del Gobierno sueco. En el otoño de 2010 se instalaron los príncipes Victoria y Daniel de Suecia. Los jardines de Haga Park son uno de los lugares de recreo más visitados de Suecia.

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Tullgarn Palace, cerca de Trosa, en Sörmland, es uno de los destinos más populares asociados a la Familia Real. Esta residencia de verano, a una hora en coche de Estocolmo, tiene una fachada austera y un interior decoradó con sorprendentes variantes de estilo rococó. Tullgarn se relaciona con el rey Gustavo V y la Reina Victoria, que pasaron aquí algunos de sus veranos. El palacio, construido originalmente en torno a 1720, está abierto durante la temporada de verano con visitas guiadas diarias, y, como en casi todas las resencias mencionadas, merece la pena no solo por el edificio y su contenido, sino por las inmensas zonas de parques y sendas que lo rodean.

El Palacio de Rosendal se halla en Djurgården, una isla del centro de Estocolmo, y fue construido en 1820 por el Rey Carlos XIV Juan. Fue originalmente una residencia de verano, aunque no era un hogar para largas estancias, sino más bien un lugar para escapar de la formalidad del Palacio Real. El palacio permanece hoy casi como se hizo en la vida de su inspirador. Durante los meses de verano, el palacio está abierto al público para realizar visitas guiadas. El jardín, como en los casos anteriores, también es impresionante. Puede recorrerse a pie, y luego descansar en una cafetería con terraza, en este paraje natural fascinante.

Se trata de un palacio barroco, construido sobre una fortaleza del siglo XVI. Se halla en una isla formada por el río Kolbäcksån, en el extremo oeste del lago Mälaren. La Reina viuda Hedvig Eleonora (siglo XVII) dirigió muchos proyectos de construcción, entre ellos este, un nuevo palacio y, alrededor, una veintena de edificios. El palacio fue completado por Nicodemus Tessin, «el Viejo». A los miembros de la Familia Real les gustaba pasar la noche aquí, en su camino hacia el sur. El exterior tiene un tono amarillo. Y, por supuesto, está rodeado de amplias zonas verdes. Muchas parejas eligen para casarse la capilla de este palacio, un escenario romántico como pocos. En el interior, hay una excelente colección de pinturas suecas. Hoy en día también se celebran competiciones ecuestres durante todo el año. Está abierto al público los meses de verano, y el resto del año previa reserva.

El Palacio de Ulriksdal se halla en el municipio de Solna, a unos ocho kilómetros de Estocolmo, a orillas del lago Edsviken. Fue construido en 1644. Algunos de los apartamentos del Rey Carlos XV y del Rey Gustavo VI Adolfo, el último residente real del palacio, están abiertos al público. También merece la pena pasar por el teatro Confidencen, que se encuentra dentro del conjunto del palacio, y que está considerado una joya arquitectónica, el más antiguo teatro de estilo rococó en Suecia, obra de Carl Fredrik Adelcrantz. En la actualidad funciona para obras de ópera, ballet y conciertos. El palacio puede visitarse durante todo el verano de martes a domingo.

El Pabellón de Gustavo III, en el parque de Haga, es uno de los mejores ejemplos del estilo gustaviano sueco, de fines del siglo XVIII. El pabellón fue construido por el arquitecto Olof Tempelman, con instrucciones muy concretas del Rey Gustavo III, pero la decoración interior se encargó a Louis Masreliez. El Pabellón puede visitarse durante los meses de verano, con visitas guiadas. Gustavo III utilizó el pabellón durante años antes de su asesinato, en 1792.

Solliden es la residencia de verano de la Familia Real Sueca en la isla de Öland, en la costa sureste de Suecia. En realidad, este palacio parece una casa de campo de estilo italiano. Sus parques son magníficos. La mejor fecha para visitar Solliden es el 14 de julio. Ese día la Princesa Victoria, heredera al trono de Suecia, celebra sus fiestas de cumpleaños al aire libre. La celebración se televisa y cuenta con espectáculos en directo con artistas suecos.