Recetas
La ensalada tricolor que es un tesoro nutricional
Los primeros días del otoño afloran las primeras granadas, una fruta de color vivo que destaca por su contenido en vitamina A y B y que puede tomarse como postre, entrantes o primeros platos
Acaba de comenzar el otoño y no queremos perder la oportunidad de hablaros de una de sus frutas más representativas: la granada. Las granadas son el fruto del árbol Punica granatum, originario de las regiones áridas y semiáridas de Asia occidental y el ... Mediterráneo. Se dice que las mejores variedades, y también algunas de las más estudiadas se cultivan en Irán. El fruto tiene una corteza seca que rodea los pequeños frutos de su interior y que habitualmente son de color rubí, aunque también existen variedades amarillas . Son dulces, agrias y, a veces, astringentes por causa de su jugo rico en antioxidantes fenólicos y antocianinas.
Las granadas poseen un alto contenido en agua , siendo su valor calórico muy bajo . Destacan por su contenido en vitaminas A y C y en menor medida B6. También es rica en manganeso y potasio .
La granada es rica en compuestos fenólicos, flavonoides y antocianinas, lo que determina su actividad antioxidante. Los taninos que contienen son los que le confieren sus propiedades astringentes y antiinflamatorias.
Además de su contenido en ácido málico y cítrico , su contenido en ácido elágico hace de inhibidor de la aromatasa, una enzima que convierte los andrógenos en estrógenos.
Ingredientes
- Taza de quinoa 1
- Granada en buen estado 1
- Nueces picadas ½ de taza
- Aguacate grande cortado en cubitos 1
- Manzana verde tipo granny smith cortada en cubitos 1
- Rama de apio 1
- Tazas de espinacas baby y rúcula 2
- Unas ramas de perejil fresco
- Dientes de ajo 2
- Cebolla pequeña 1
- Opcional: queso fresco 150 gramos
Vinagreta
- Lima o limón, el zumo 1
- Aceite de oliva virgen extra 3 cucharadas
- Pimienta negra molida Al gusto
- Sal marina Una pizca
Las granadas se suelen procesar para elaborar zumo e incluso vino, pero son absolutamente deliciosas si se consumen de forma natural, adicionándolas a un desayuno o merienda, con yogur y canela , en ensalada de frutas y vegetales o solas.
La mejor época para disfrutarlas es el otoño ya que sus granos están en un estado de maduración óptimo . Hay que elegir ejemplares de buen tamaño y peso, con piel de color rojo vivo con matices marrones.
En la receta de hoy la granada aporta un contrapunto crujiente y ácido además de integrarse junto a otros ingredientes absolutamente deliciosos y también de temporada.
Preparación
Paso 1
Cocer la taza de quinoa en 3 tazas de agua hirviendo pasando de fuego fuerte a medio una vez que hayan transcurridos 7 minutos. Dejar que se evapore todo el agua y remover con un tendor para que se quede suelta.
Paso 2
En una sartén con 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra dorar la cebolla y el ajo muy bien picados. Una vez que estén blandos retirar y mezclar con la quinoa , remover y dejar enfriar complatamente.
Paso 3
Pelar y picar el aguacate en cubos. Picar la manzana verde también en cubos, el perejil bien fino y las nueces en trozos no muy pequeños. Desmenuzar el queso y separar los granos de la granada de su piel. Mezclar todos los ingredientes con la quinoa y añadir también los brotes verdes. Preparar el aliño con el zumo de limón, el aceite de oliva, la sal y la pimienta negra , agitando para emulsionar ligeramente la mezcla.
Paso 4
Vertar la vinagreta sobre la ensalada, mezclar bien y servir.
Un plato lleno de color y a la vez ligero que representa una transición deliciosa hacia el otoño.
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