Esto es lo que pasa si tienes la costumbre de tener el móvil en la mesilla

La necesidad de estar permanentemente conectados es algo que se ha agravado con la crisis provocada por el Covid-19. Teletrabajo, videoconferencias, clases online… el móvil y los dispositivos electrónicos rigen nuestro día a día. El problema viene, tal y como señala Gabriela Paoli, psicóloga y autora del libro «Salud digital: claves para un uso saludable de la tecnología» cuando esa hiperconexión trae consigo trastornos y problemas de conducta que generan ansiedad , estrés y nerviosismo.

Pero esto es aún más grave si cuando vamos a dormir dejamos el teléfono cerca de nosotros. Vale que si tenemos la alarma puesta no tiene ningún sentido dejarlo en otra estancia de la casa porque seguramente no lo escucharíamos, pero los expertos sí que aconsejan que este dispositivo se encuentre lejos de nuestra cama para evitar la tentativa de cogerlo si nos despertamos por la noche.

«Es riesgoso dormir cerca del móvil ya que si durante la noche nos despertamos, seguramente sucumbiremos a conectarnos, y allí perderemos horas de sueño que nos traerán consecuencias negativas al día siguiente», comenta la experta en sueño. ¿Cuáles son esos problemas? Los más frecuentes son el cansancio, falta de concentración, irritabilidad, desgano… Al parecer, cómo y cuánto duermes por la noche hará que tengas un mejor o peor día.

Son muchos los que no están tranquilos si el móvil no es una «extensión» más del cuerpo. Incluso durmiendo, lo tenemos que tener cerca porque, si no está al alcance de la mano, produce una sensación de desasosiego y sentimos la necesidad de correr a buscarlo.

Dado que dejarlo en la mesilla no es una buena opción, Gabriela Paoli recomienda lo siguiente: «En primer lugar, hay que apagar el wifi, y en segundo lugar poner el móvil en modo avión y dejarlo en otra habitación. Hay que volver a los viejos y sanos hábitos de siempre: el despertador, un buen libro, o escuchar algún programa de radio o música antes de dormir. Así tendremos muchas más posibilidades de no caer en la tentación de conectarnos durante la noche y que nos robe horas de descanso».

Si crees que tienes «vicio» al teléfono móvil, Gabriela Paoli manifiesta que eso ya es un gran paso: «Para luchar contra algo primero debemos saber qué es, por lo que el primer paso es ser conscientes de que estamos cayendo en este vicio y que nos puede afectar a nuestra productividad e incluso a nuestra salud».

Según la psicóloga, nos puede crear ansiedad y nerviosismo en casos más extremos ya que «sentir que nos podemos perder algo puede generar mucho malestar en ciertas personas».

Según el último informe de la Sociedad Digital en España, el 38% de la población pasa ya la misma cantidad de tiempo conectada al móvil que interactuando directamente con personas. Y es que, recientemente, en 2018 el Ministerio de Sanidad español incluyó la adicción a la tecnología en el Plan Nacional de Adicciones .