Por qué no debes beber agua con azúcar para aliviar las agujetas

La realidad que se conoce a día de hoy, es que las agujetas son pequeñas lesiones que se generan en las fibras musculares produciendo dolor, inflamación, rigidez articular y pérdida de fuerza, durante las 24-72 horas posteriores al ejercicio y que por suerte, duran como mucho una media de 3-5 días.

Al fin y al cabo, son la consecuencia de someter nuestros músculos a más estrés del que están acostumbrados.

Entonces, si el famoso remedio casero de beber agua con azúcar ha resultado ser un mito, ¿Qué podemos hacer para combatir con las agujetas?

Al desmentir la formación de cristales a partir del ácido láctico, que beber agua con azúcar ayude a disolverlos carece de todo sentido. Aunque cierto es, que al beberla después de hacer ejercicio podemos sentir un chute de energía, pero simplemente es porque estamos reponiendo los depósitos que han sido consumidos durante el ejercicio, habiendo formas más saludables y nutricionalmente más completas de hacerlo.

Para paliar los efectos de las agujetas, basta con planificar la intensidad de nuestros entrenamientos de forma progresiva, siendo constantes y respetando estrictamente el descanso para que el músculo se recupere.

Por otro lado, no debemos olvidarnos de la alimentación y su importante papel en la preparación y recuperación:

Las ingestas de antes, durante y después del entrenamiento pueden ser un factor determinante para un buen rendimiento durante el ejercicio y una posterior recuperación.

Y aunque cuando hablemos de deporte, el macronutriente estrella sean las proteínas, por su papel en la contracción muscular y en el crecimiento, reparación y mantenimiento de nuestro organismo, no debemos olvidarnos de los hidratos de carbono y su función como principal combustible, de las grasas, priorizando siempre aquellas de calidad y del agua.

Siendo conscientes de que el 60-70% de nuestro cuerpo es agua, por lo que podemos deducir que todas las reacciones de nuestro organismo se producen en un entorno acuoso, Así que si queremos asegurar un buen funcionamiento, evitar lesiones y asegurar una buena reparación muscular, una adecuada hidratación es imprescindible.

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Pero no solo una buena hidratación es básica para evitar lesiones y mejorar el rendimiento y recuperación en el ejercicio, sino también son importantes los electrolitos que contienen y las vitaminas que nos pueden ayudar a reducir el estrés oxidativo producido en una sesión intensa de entrenamiento.

Por ejemplo, el consumo de verduras y frutas ricas en vitamina C, nos ayudarán a sintetizar colágeno y a su vez nos hidratan y hará su función como antioxidante.

Así que, agua con azúcar no, mejor una buena alimentación e hidratación pautada antes, durante y después de los entrenamientos que serán clave para que esas agujetas no se conviertan en lesiones y por supuesto, una intensidad de ejercicio progresiva y gradual para que esas agujetas cada vez molesten menos.

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Puedes saber más de Elisa Escorihuela a través de su cuenta de Instagram: @eliescorihuela , su labor en el Centro de Nutrición Nutt y en su libro 'Dietoterapia'. Además puedes leer todas las recomendaciones nutricionales que recogen sus artículos en ABC de 'Aula de nutrición'.