Bruselas, en un paso sin precedentes, pide a Italia un nuevo presupuesto

La base de la argumentación de la Comisión no es solamente que la coalición de nacional populistas y demagogos (La Liga y Movimiento 5 Estrellas) ha diseñado unas cuentas públicas que aumentan notablemente el gasto y el déficit aunque lo mantenga por debajo del 3%, sino sobre todo por el riesgo que supone la acumulación de un 135% del PIB de deuda, de lejos el porcentaje más elevado de toda la UE solo superado por Grecia.

Si Italia no cambia los números, la Comisión puede considerar la vía de las sanciones. Según dijo el comisario de Economía, Pierre Moscovici, en Estrasburgo, donde se encuentra reunida la Comisión, Italia «ha tenido un apoyo notable de la Comisión en forma de flexibilidad» durante estos años, pero ahora requiere a Roma que establezca un presupuesto que empiece a reducir la deuda. El peso de esta deuda italiana representa 37.000 euros por persona y los intereses ascienden a 65.000 millones de euros anuales, lo que equivale al presupuesto de educación de todo el país.

Moscovici y el vicepresidente Vadis Dombrosvkis han asegurado, no obstante que «las puertas de la comisión sigue abiertas» para buscar una solución a este problema.