Recomendaciones a seguir si quieres prevenir la miopía en tus hijos

El exceso de uso parece ser una de las cuestiones que más preocupa a las familias. Según el informe de Multiópticas, casi un 88% de progenitores expresa su inquietud por el excesivo rato que pasan sus hijos delante de una pantalla. Y de las tres horas de media que los niños están delante de una pantalla, los padres encuestados consideran que debería reducirse a la mitad en los días laborables y no llegar a las tres horas los fines de semana, pasando a considerar otras alternativas de ocio relacionadas con estar jugando o al aire libre. Sin duda, corrobora Herce, «entre semana no deberían estar tres horas, sino una hora, hora y media como máximo. Durante los los fines de semana se podría ampliar un poco más, pero siempre compaginando con actividades al aire libre, siempre eque el tiempo lo permita. De alguna forma, monitorizar el consumo para el público infantil, más sensible y con el ojo todavía en formación», insiste.

«El hecho de que, cada vez más, los menores trabajen más la vista estando expuestos a la influencia de las pantallas y pasen menos tiempo al aire libre está favoreciendo la aparición de afecciones oculares como la miopía », prosigue el doctor Manuel Díaz Llopis, Catedrático de Oftalmología de la Universidad de Valencia. «Por este motivo es fundamental concienciar a los padres de la importancia de las revisiones visuales, sobre todo, teniendo en cuenta de que hablamos de la salud visual de un niño, de incentivar las actividades al aire libre y de controlar los tiempos de exposición a la tecnología en su tiempo de ocio», añade.

Las recomendaciones de Herce en este sentido serían: controlar el nivel de luminosidad de las pantallas , la distancia a la que consumimos los contenidos audiovisuales, que debería ser de 35, 45 centímetros, o la ergonomía visual a la hora de estar frente a un dispositivo con pantalla. También el mantener una luz auxiliar en la habitación para cualquier tarea que se realice frente al móvil o la tableta. «Son demasiados los padres que nos refieren que sus hijos están a oscuras en su cuarto con el teléfono. Esto hace que todo el esfuerzo visual se concentre en esa zona, y a la larga, esto causa fatiga visual u otras alteraciones oculares», señala este optometrista.

Estas indicaciones, concluye Herce, van en línea con la idea de que tanto niños como adultos deberían hacerse revisiones oftalmológicas cada 6 meses por el uso que hacemos de la tecnología. «Cada vez hay más niños miopes , y así lo señalan los datos. Es necesario hacer una labor de prevención para que, si hay un problema, cuanto antes lo localicemos y lo podamos solucionar, mejor».