Begoña Villacís anuncia que está embarazada y que saldrá de cuentas tras las elecciones

Villacís tiene dos hijas de 12 y 13 años . Fue madre por primera vez a los 28 años, compatibilizando su desarrollo profesional como abogada con su faceta de progenitora. La portavoz de Cs en el Ayuntamiento madrileño asegura encontrarse «bien» e «ilusionada» con las dos grandes metas que tendrá que conjugar este 2019. Ante el desplome, según vaticinan algunas encuestas , del «partido del cambio» que representa Manuela Carmena en la capital, Begoña Villacís podría ser la opción más valorada entre los votantes de la derecha, el centro y acaparar incluso a aquellos de la izquierda moderada que estén descontentos con el Partido Socialista en la ciudad. La tesis que cobra más fuerza a estas alturas es la de que el o la primera edil de Madrid saldrá de la coalición que formen PP, Ciudadanos y Vox.

Villacís no es la primera política que se enfrenta a una campaña electoral en la recta final de su gestación. La ex vicepresidenta del Gobierno –entonces portavoz popular en el Congreso de los Diputados–, Soraya Sáenz de Santamaría , dio a luz a su primer hijo con 40 años, y a nueve días de celebrarse las Elecciones Generales del 20 de noviembre de 2011, comicios que dieron el triunfo a su partido.

Otros dos casos conocidos de políticas españolas que han cumplido su sueño de ser madre ostentando cargos en la primera línea del poder son las de las socialistas Carme Chacón y Susana Díaz .

Chacón tuvo a su primer hijo en 2008 llevando las riendas del Ministerio de Defensa. Con 37 años, la política catalana conseguía ser mamá frente a todo pronóstico, ya que los médicos le habían desaconsejado tener descendencia debido a la enfermedad cardíaca que padecía y que le arrebató la vida en agosto de 2017.

Díaz debutó en la maternidad en julio de 2015 al frente de la Presidencia de la Junta de Andalucía. En enero de ese año informó a los periodistas, en un acto de ampliación de un colegio público, de su estado de buena esperanza. Una semana más tarde comunicaba que rompía con Izquierda Unida y adelantaba los comicios al 22 de marzo, cuando alcanzaba los cinco meses de gestación. La presidenta revalidó el cargo con los mismos escaños que consiguió en 2011.