La Fiscalía alerta de que los nuevos yihadistas en España son cada vez más jóvenes

La memoria, presentada este jueves por el fiscal General del Estado, Álvaro García Ortiz, con motivo de la Apertura del Año Judicial, subraya que la «impulsividad, idealismo y necesidad de pertenencia a un colectivo» convierte a los menores «en un blanco fácil para la propaganda extremista, que se difunde principalmente a través de internet y las redes sociales» y reclama por ello un enfoque multidisciplinar para atajar la situación.

«Los grupos terroristas utilizan evolucionadas técnicas de captación para manipular a los menores, distorsionando su visión de la realidad y ofreciéndoles un falso sentido de identidad y de un propósito. A través de una narrativa simplista y atractiva, les prometen un mundo idealizado donde podrán encontrar la justicia y la satisfacción personal que anhelan», dice el informe.

Subraya que «la radicalización yihadista en España se caracteriza por la juventud de los radicalizados» y «los espacios virtuales desempeñan un papel central como catalizadores del proceso de radicalización». Advierte además del momento histórico: «Los conflictos internacionales y las crisis geopolíticas han tenido una gran repercusión en la radicalización yihadista en España».

«En un contexto global marcado por la constante amenaza del terrorismo yihadista, la protección de la sociedad frente a este tipo de actuaciones delictivas se convierte en una responsabilidad compartida por todos los actores del sistema de justicia», dice el informe. De las 26 investigaciones abiertas el año pasado a menores en la Audiencia Nacional, que ya eran un 225% más que en el año anterior, 19 lo eran por terrorismo y 17 de ellas, de tipo yihadista.

En un caso era un enaltecimiento de ETA y el resto, agresiones sexuales cometidas en el extranjero. Fueron 20 las diligencias que acabaron en expediente de reforma, 17 por yihadismo. Además, se dictaron 3 sentencias condenatorias. En total, el terrorismo representa un 35% de las diligencias previas que abrió el año pasado la Audiencia Nacional, el órgano competente para estos delitos. Fueron 195 asuntos y el 78% relacionados con ese islamismo violento radical.

En informes anuales anteriores, la Fiscalía desglosaba por tipos de amenaza terrorista incluyendo una mención a lo que denominaba «movimiento violento independentista catalán», referencia que este año ha desaparecido de la Memoria pese a que en 2023 seguían abiertas dos causas por delitos de terrorismo en el contexto post procés (los CDR y Tsunami Democrátic). Ahora constan en el apartado «otros grupos».

Según refiere la memoria anual, el año pasado resultaron detenidos 29 individuos por terrorismo yihadista, de los que 19 estaban en España y 10, en el extranjero. Desde los atentados del 11 de marzo de 2004 el total de detenciones supera el millar: 976 en 379 operaciones en España y 136 en otros países mediante 53 operaciones.

Recoge además que el año pasado se cometieron dos atentados terroristas en territorio nacional. Uno, el del yihadista de Algeciras, Yassine Kanjaa, que asesinó a un sacristán después de intentar asesinar a otro religioso y cuyo caso está pendiente de que el Tribunal Supremo decida si su salud mental es compatible con la imputación de terrorismo. Tenía 26 años.

El otro atentado fue el disparo a bocajarro que hirió de gravedad al ex eurodiputado Alejo Vidal-Quadras, cuya «etiología», según concreta la Fiscalía, aún se está investigando.