Las tres crisis locales de Vox en Valencia: un goteo de bajas entre acusaciones de «traición» y abandono del «municipalismo»

La formación consiguió salir airosa de la ruptura total con dos de sus ediles en la ciudad de Valencia, entre ellos el portavoz y candidato en las últimas elecciones, Juanma Badenas. Tanto él como Cecilia Herrero pasaron en marzo al grupo de no adscritos en el Ayuntamiento que lidera la popular María José Catalá, entre graves acusaciones cruzadas. Pero la dirección nacional de Vox consiguió reconducir la situación y ambos regresaron al partido pocas semanas después con un perfil bajo.

Con esta crisis taponada y la mayoría en Valencia amarrada, de momento, a los de Abascal les han ido surgiendo otros quebraderos de cabeza. Su portavoz y primer teniente de alcalde en Torrent -la quinta localidad más poblada de la región, con 90.000 habitantes- ha abandonado Vox, pero no ha dejado el acta de concejal. La intervención de la cúpula estatal no ha surtido efecto en esta ocasión.

Lo mismo ha ocurrido con una de sus ediles en Náquera, el único municipio valenciano en el que el partido ostenta la Alcaldía con el apoyo del PP. Los motivos con los que se argumentan ambas salidas son parecidos: discrepancias con la dirección, falta de apoyo e incluso de libertad.

«Los intereses partidistas terminan pesando más que las necesidades reales de nuestros vecinos», aseguró Guillermo Alonso del Real, hasta ahora edil de Educación y Deportes de Torrent. Unas competencias que la alcaldesa popular Amparo Folgado le ha retirado. Su antigua compañera de partido, la concejal en Náquera Marta Izquierdo, apuntó a un «progresivo aislamiento» y a su necesidad de «actuar con independencia» y «respeto a legalidad», «sin interferencias ni presiones externas».

Desde Vox les han tachado de «tránsfugas« y les han pedido, sin éxito, que devuelvan el acta. En el caso de Alonso del Real, consideran que lo ocurrido «no responde a un conflicto ideológico ni a diferencias políticas reales, sino a una estrategia basada en el calculo personal y la ambición individual». Misma reflexión -la de utilizar su plataforma para promocionar en política- que utilizan para denunciar las «serias acusaciones, insidias y falsedades» que, a su juicio, ha vertido Izquierdo.

En ambos casos, su marcha a los no adscritos deja igualados a los bloques de derecha e izquierda -gobierno y oposición- y les coloca a ellos como figuras clave en la gobernanza de Torrent y Náquera. Los alcaldes cuentan con el voto de calidad en caso de empate en las votaciones, pero su voto puede decantar la balanza, con el temor añadido -aunque por ahora poco probable- de que pudieran apoyar una moción de censura.

En ese sentido, y aunque en el PP señalan que se trata de conflictos internos que debe solucionar su socio, este nuevo escenario les afecta directamente, pues les obligará a negociar con los no adscritos cada punto que se lleve al pleno para que salga adelante.

Más complicado es el panorama en la localidad castellonense de Almassora. La espantada de dos de los tres ediles de Vox a los no adscritos deja al grupo municipal con una sola concejal y a la suma con el PP (ocho concejales) en minoría frente a los siete del PSOE y los tres de Compromís.

Las fricciones internas con su compañera y un mayor entendimiento con los ediles del PP estarían detrás de lo que desde Vox califican como una «traición». «Desde hace tiempo, vienen sucediéndose actuaciones en el seno del partido que, a mi juicio, no son representativas de la vida pública y el servicio a los ciudadanos. Se ha abandonado completamente el municipalismo», denunciaba uno de los dos exafiliados, el hasta ahora portavoz de Vox en Almassora, Vicente Martínez-Galí.

La presidenta de la formación en la provincia de Castellón y de las Cortes Valencianas, Llanos Massó, lanzó este viernes un claro aviso al PP: o los saca del gobierno de Almassora o rompen el pacto que sellaron con los populares en 2023.

En paralelo, a todas esas bajas se suman la de una concejal de Vox en Bétera -que también deja la vicepresidencia del partido en la provincia de Valencia- y la del único regidor de la formación en Serra. Sin embargo, ambos se marchan por motivos personales y sí dejan el acta.