De hecho, ese mismo 16 de julio el consistorio ya amenazaba a los vándalos en sus redes sociales para tratar de evitar nuevos episodios desagradables en la instalación: «Para aquellas personas que se entretienen por las noches accediendo al Polideportivo municipal a lanzar objetos dentro de la piscina de verano y romper algunos materiales, sepan que la Policía Local los identificará y asumirán las consecuencias de estos actos vandálicos. El incivismo nos perjudica a todos».
Sin embargo, el aviso no ha surtido efecto y este martes Picassent se ha visto obligado a cerrar su piscina tras encontrarla con heces en el interior del agua, un hecho que se ha extendido con frecuencia durante este verano y que ahora obligará a la localidad valenciana a vaciarla por completo para volverla a llenar y abrir «a la mayor brevedad posible».
Y, como consecuencia de ello, la noticia no ha pasado desapercibida para los habitantes del municipio, cuyas reacciones de hartazgo no se han hecho esperar en redes sociales desde bien poco después a la publicación del anuncio.
Así, una usuaria se lamentaba que «lo de este año ya es un cachondeo, no hay derecho que estemos pagando la cuota de socios y nos quedemos sin piscina cada dos por tres», mientras otro se quejaba en tono irónico de que «alguien se ha dejado la puerta de la granja de cerdos abierta y se han colado en la piscina».
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete