La Diputación plantea proyectos por valor de 90 millones de los fondos Feder para nueve zonas de la provincia

En el caso de Castilla-La Mancha, los fondos Feder destinados a este programa ascienden a 142,4 millones de euros, con lo cual habrá que esperar la resolución final para ver cuanto de los solicitados se destina a cada provincia de la región. En este sentido, Joaquín Romera ha manifestado que «la Diputación de Toledo compite con muchos proyectos de las comunidades autónomas, pero este es un partido que hemos venido a jugar y salimos a ganar«.

Se trata de unas ayudas que no están municipalizadas, sino que han sido planteadas con el criterio y las necesidades de las denominadas como áreas urbanas funcionales. En concreto, según ha indicado Romera, las ayudas propuestas se han articulado tras la división de la provincia en nueve zonas en las que cada uno de los alcaldes ha ido aportando sus propuestas hasta conformar un proyecto común para cada zona. Las nueve áreas las conforman Ocaña, Talavera, Mancha occidental y oriental, Montes de Toledo, Sagra Alta y Sagra Baja y Torrijos norte y sur.

La fase de solicitud de las ayudas comenzó el pasado mes de febrero y a partir de aquí la resolución final del Ministerio de Hacienda se deberá producir en un plazo de seis meses. «Se trata de iniciativas clave para el desarrollo de la provincia, dentro de proyectos urbanos de sostenibilidad, y son candidaturas de garantía», ha destacado Romera. Respecto a la cuantía total propuesta de 90,3 millones de euros, el 85 por ciento (76,8 millones) corresponderán a los fondos Feder, mientras que el 15 por ciento restante será costeado por la Diputación Provincia (10 por ciento) y los ayuntamientos (5 por ciento), siendo la población beneficiada de 512.922 personas.

La zona de la provincia que suma el presupuesto más elevado es la de Talavera, con 18,7 millones de euros, mientras que en el resto de zonas los proyectos presentados ascienden como máximo a diez millones de euros. En el caso de la zona de Talavera, sin municipios mayores de 5.000 habitantes, se propone, entre otros proyectos, la modernización de infraestructuras, la captación de aguas pluviales, accesibilidad a edificios públicos, creación de rutas rurales o el arreglo de caminos públicos.

El diputado Jesús Guerrero ha explicado las cuatro líneas de intervención a la hora de elaborar las propuestas. La primera es la modernización de infraestructuras públicas, con 31,5 millones de euros, que supone la renovación de infraestructuras públicas, renovación de instalaciones municipales con criterios de sostenibilidad, paneles solares y led o carpintería.

La segunda es la promoción del turismo sostenible con la creación y señalización de rutas de senderismo y cicloturismo, miradores o revalorización del patrimonio y la gastronomía. Los proyectos de esta línea suponen 22 millones de euros.

Por su parte, para la conservación y protección del patrimonio natural se destinan 30,6 millones de euros (espacios verdes o corredores naturales), y por último la dinamización económica y el desarrollo social para luchar contra la despoblación contiene proyectos por valor de 6,2 millones de euros.