El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) decidió anular la orden de la Conselleria de Sanidad de 2013 que estableció la jubilación forzosa a los 65 años para el personal sanitario, por ser «contraria a derecho».

La sentencia de la Sala de lo Contencioso-Administrativo, que estima el recurso que interpuso el sindicato CSI·F, estima que la falta del informe del Consejo Jurídico Consultivo, fruto de la «acelerada tramitación» de la orden, determina la «nulidad radical» del texto aprobado.

El sindicato señaló que esta sentencia permite continuar en activo a quienes lo deseen una vez cumplidos los 65 años y obliga a readmitir al personal afectado –alrededor de un millar de personas– y a abonarle los salarios dejados de percibir desde el día de su jubilación forzosa.

El Colegio de Médicos de Valencia se congratuló esta sentencia y recordó que en la actualidad un total de 882 médicos de la provincia de Valencia tienen entre 64 y 70 años, y este fallo posibilita que «médicos con gran experiencia y conocimientos puedan seguir aportando un trabajo positivo que redunde en beneficio de los ciudadanos y de la sanidad».

La presidenta del citado colegio, Mercedes Hurtado, señaló, después de conocer el fallo, que «no tiene sentido obligar a jubilarse a compañeros en el pleno uso de sus facultades como profesionales». La sentencia del alto tribunal valenciano no es firme y cabe recurso de casación contra ella, aunque la Conselleria de Sanidad aún no ha decidido si hará uso o no de ese recurso.