Suscribete a
ABC Premium

'Melasudismo': nueve razones para tomarse la vida menos en serio

Pablo Álvarez, experto en innovación y transformación digital, comparte en su obra una filosofía de vida que invita a «fliparse menos y a no dar tantas vueltas a las cosas»

Anticrisis: ocho reglas de oro para triunfar frente a la adversidad

"No puedes mejorar sin fallar: más que exigirse menos, hay que aprender a gestionar los fallos"

Minimalismo, calma y paz mental en la propuesta del 'melasudismo'
Raquel Alcolea

Esta funcionalidad es sólo para registrados

«Pasamos parte de la vida dedicando tiempo a hacer cosas que nos la sudan para alcanzar objetivos que nos la sudan, tratando de satisfacer las expectativas depositadas sobre nosotros por gente que, en el fondo, nos la suda, y a la que nosotros ... también, por desgracia, se la sudamos» (pausa dramática para leer de nuevo la frase y seguimos...). La base sobre la que se asienta el 'melasudismo' que plantea Pablo Álvarez puede resultar demoledora, pues es esa torta con la mano abierta que, como mínimo, nos hace desconectar el piloto automático y despertar del letargo. Me la suda, nos la suda, sí (sea lo que sea lo que nos sude a cada cual). Pero lo cierto es que la propuesta es menos nihilista de lo que parece a simple vista pues, tal como aclara el autor de 'Melasudismo' (Plataforma Editorial), lo que él defiende no es que nos la sude todo, sino más bien que aprendamos a elegir mejor aquello que nos importa. «Uno de los mensajes que intento transmitir es que debemos tomar conciencia de lo limitados que son nuestro tiempo y nuestra energía y que eso nos debería hacer reflexionar sobre a qué dedicamos (o en qué perdemos) realmente ese tiempo y esa energía, pues lo suyo sería hacerlo con criterio y con un sentido crítico», explica. Y este planteamiento pasa, según comenta, por tener claro cuál es nuestro propósito y cuáles son nuestros valores pues ambos funcionan como esa brújula vital que nos permite elegir cuáles son las batallas que merecen la pena y qué es lo verdaderamente importante para nosotros. Repetimos. Para cada uno de nosotros (y no para nuestros jefes, nuestros compañeros de trabajo, nuestra familia, nuestra pareja o nuestros vecinos).

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia