A subasta uno de los diez Bugatti Centodieci que hay en el mundo: podría superar los 15 millones de euros

RM Sotheby's subastará en febrero una de las diez unidades fabricadas del Bugatti Centodieci, el modelo basado en el icónico Chiron que toma inspiración del legendario EB110, un modelo histórico de los años 90, que fue presentado en sociedad en 2019 y entregado a sus clientes ya en esta década –la última unidad se entregó en diciembre de 2022—.

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Rubén García

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La unidad que se va a subastar de este vehículo que tiene en su garaje Cristiano Ronaldo, tan solo cuenta con 437 kilómetros recorridos desde que saliera de la fábrica de Molsheim, y todavía mantiene vigente su garantía original hasta mediados de 2026.

Capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 2,4 segundos y de alcanzar una velocidad máxima de 380 km/h, en lo estético destaca por su acabado en blanco (Quartz White) con detalles grises (Grey Carbon) y un interior en el que predominan el negro (Beluga Black ) y, de nuevo, el color gris (Gris Rafale).

Aunque se dice mucho cuando se habla del Bugatti Centodieci, con razón, que es un coche que combina la esencia del Chiron y del EB110, lo que unido a que solo se fabricaran una decena de unidades le añade si cabe más exclusividad al coche, y por ende, más valor, lo cierto es que también es el modelo con el que la casa celebró sus 110 años de historia.

No en vano, el Cientodieci se llama así, «110» en italiano, en lo que es una clara referencia no solo al histórico modelo de los 90 sino también al citado aniversario de la casa fundada por Ettore Bugatti en 1909.

Del Chiron, como explica RM Sotheby's, el Centodieci toma el chasis y el sistema de propulsión, si bien cuenta con una versión más desarrollada del histórico motor W16 de 8.0 litros de Bugatti. Un motor que cuenta con cuatro turbocompresores capaz de desarrollar una potencia de 1.600 CV. Su mayor velocidad punta se debe, entre otras cosas, a su ligereza, ya que se aligeró en 20 kilogramos en peso vacío con respecto al modelo del que bebe.

Además, del Bugatti EB110, el Cientodieci toma la esencia de su carrocería, con detalles que recuerdan a este. Es el caso, destacan desde RM Sotheby's, de la «pequeña parrilla en forma de herradura, un divisor frontal puntiagudo, faros extremadamente estrechos, entradas circulares en los pilares C y un alerón trasero fijo».

Este último está fabricado en fibra de carbono, y aunque recuerda al EB110, es más evidente el homenaje en los pequeños óvalos que se aprecian tras las ventanillas laterales del Cientodieci. Por su parte, los tubos de escape apilados en pareja es un detalle que la factoría francesa utilizó en una variante del Chiron, el Super Sport.

En cualquier caso, estamos ante una rareza muy especial, un coche que solo puede ganar valor de mercado con el paso del tiempo por su personalidad única, su historia y contexto, y también por su exclusividad, ya que solo hay diez en todo el planeta.

Por ello, como subrayan desde la casa de subastas que pondrá a la venta una unidad en apenas unas semanas —la número 006, encargada en agosto de 2019—, el Centodieci es un superdeportivo que «se sitúa con razón en lo más alto de la célebre línea de modelos basados en el legado de Molsheim».

Prueba de ello es que la estimación de la prensa especializada es que el coche alcance una cifra cercana a los 15,5 millones de euros en la subasta, lo cual es prácticamente el doble de su valor original, que superó por poco los 8,5 millones. De momento, RM Sotheby's atribuye al coche que va a subastar un rango económico de 10 a 15 millones de dólares, así que no es descabellado pensar en que alcance esos 15,5 millones de euros.

Solamente el Bugatti La Voiture Noir, el coche más exclusivo jamás diseñado por Bugatti, del que solo hay una unidad en todo el mundo —se vendió originalmente por un precio de 18 millones de euros—, puede mirar por encima del hombro al Centodieci.

Habrá que esperar a la primera semana de febrero —4 y 5 de dicho mes— para saber el precio que alcanza el Cientodieci en la subasta de Rm Sotheby's que se celebrará en París. Ese día, este Bugatti compartirá protagonismo con otras joyas de cuatro ruedas como uno de las 25 unidades del coche de carreras Ferrari 512 M fabricadas en 1970, que puede superar los 12 millones de euros en la puja, y, sobre todo, el Ferrari 250 LM de 1964 ganador de las 24 Horas de Le Mans de 1965, un coche de carreras que no se venderá por menos de 25 millones de euros.