El Papa se ve obligado a reducir de nuevo su agenda por los problemas de rodilla

Francisco no ha podido mantener el encuentro previsto para este jueves por la mañana con el « International Jewish Committee on Interreligious Consultations », que representa a 11 importantes organizaciones judías en el diálogo con el Vaticano, con el Patriarcado Ecuménico y con el Consejo Mundial de Iglesias.

Desde el pasado miércoles, el Papa Francisco no ha necesitado usar la silla de ruedas en público sino sólo con un bastón . Sin embargo, los médicos le han aconsejado que no presida las misas para no forzar la rodilla, y tanto el sábado pasado como ayer, se ha limitado a seguir la ceremonia sentado, tener la homilía y ponerse de pie durante la consagración.

Francisco sufre una « gonalgia aguda », una dolorosa lesión causada por la artrosis y el desgaste del cartílago en la rodilla derecha. El pontífice, de 85 años, ha descartado por ahora operarse para implantarse una prótesis, por posibles complicaciones ligadas a la anestesia. Desde hace meses, recibe sesiones prácticamente diarias de fisioterapia y evita caminar o estar de pie para facilitar la recuperación.

Aparentemente la lesión está resolviéndose con este tratamiento, pues, aunque se vio obligado a cancelar un viaje a la República Democrática del Congo y Sudán del Sur inicialmente previsto para la próxima semana, el Vaticano confirmó el viernes que desde el 24 al 30 de julio viajará a Canadá .

También el Papa se mostró muy optimista. « Desde hace tres días puedo caminar », explicó feliz este lunes a un grupo de obispos brasileños. La leve mejoría se ha observado en los breves trayectos que realiza a pie, aunque sigue haciéndolo con dificultad.

Este miércoles el Papa asistió en primera fila a la misa en la basílica por la solemnidad de San Pedro y San Pablo , y entregó el palio a los nuevos arzobispos nombrados a lo largo del año, entre ellos a Luis Argüello, que viajó por primera vez a Roma como arzobispo de Valladolid. El Papa pronunció la homilía, pero no concelebró durante la misa.

Este domingo el Papa tiene previsto celebrar una misa en la basílica de San Pedro, para la comunidad congoleña y a continuación, rezar el ángelus desde el Palacio Apostólico. Esa misma tarde teóricamente comenzará sus vacaciones, que se prolongarían hasta el 24 de julio . Aunque el pontífice permanecerá en su residencia en Casa Santa Marta, no mantendrá encuentros oficiales ni audiencias generales, y abordará solamente las cuestiones urgentes.

El Papa sigue muy de cerca la guerra en Ucrania «en la que tantos cristianos luchan entre sí». Lo ha recordado en su única reunión de hoy, con representantes de la Iglesia ortodoxa. En una mención indirecta al Patriarcado de Moscú, ha subrayado que «las conquistas armadas, las expansiones y los imperialismos no tienen nada que ver con el Reino que anunció Jesús , que (antes de la Pasión) pidió a los discípulos que renunciaran a la violencia , que volvieran a poner la espada en su sitio 'porque todo el que tome la espada morirá a espada', y que cortando toda objeción dijo: '¡Basta!'».

Entre los participantes a la reunión estaba el cardenal Kurt Koch , presidente del dicasterio para la unidad entre cristianos, quien en una reciente entrevista ha revelado que en marzo el Vaticano había propuesto al Patriarca Kirill una declaración contra la guerra conjunta con el Papa , y que en el último momento el patriarca ruso se negó a firmarla, aunque ya estaba negociada.