David Ginola: «Cada día que me levanto y sé que juega Cristiano, sonrío»

22 años de aquel 4-1 que dio la vuelta al mundo. Cómo pasa el tiempo...

Éramos un equipo joven y en crecimiento que comenzaba a dar que hablar en Francia y en Europa pero que todavía no había logrado nada. Por eso aquella épica remontada en los cuartos de la UEFA (en la ida había ganado el Madrid 3-1) fue un punto de inflexión para la historia del PSG y del fútbol galo. Y, encima, en la siguiente temporada, también los eliminamos de la Recopa. Y, al año siguiente, cayó el Barça. Fuimos la pesadilla del Real Madrid y del fútbol español.

Dicen que un miembro de la Quinta del Buitre se rindió a sus pies

Cierto. Tras el famoso 4-1, Míchel se me acercó y me dijo que antes de esa eliminatoria no sabía ni quién era yo y que se sentía obligado a decirme que era un fabuloso jugador que nadie podía parar y que mi fútbol era puro arte. Ahí es cuando me dí cuenta de que realmente podía ser uno de los grandes.

Y lo era. Si hasta Mendoza se volvió loco por usted

Es verdad, el presidente del Madrid me hizo una gran oferta pero el PSG no me dejó salir. En aquella época no existía la Ley Bosman y solo se podían tener tres jugadores extranjeros en las plantillas por lo que era muy complicado que los clubes dejaran salir a sus mejores jugadores no foráneos. No me quedó más remedio que resignarme, pero cada vez que lo pienso me enfado bastante. Por mi manera de jugar y por el estilo de juego que se practicaba en el Real Madrid y en España era una oportunidad única.

21 años después, el Madrid regresa al Parque de los Príncipes, ¿qué partido espera esta noche?

El PSG no tiene rival en Francia pero le falta dar un golpe en la mesa en Europa. El año pasado hizo algo grande contra el Chelsea, pero el Barça le puso en su sitio. El Madrid es muy favorito esta noche y el PSG aún tiene que demostrar que de verdad está a la altura de los mejores. Hoy tiene una buena oportunidad.

El Parque de los Príncipes es un punto a favor del PSG, aunque ya no es la caldera que fue...

Así es. En los años noventa, la atmósfera en el estadio era alucinante, sobre todo, cuando jugamos contra el Real Madrid. Para los parisinos era un sueño ver a esos jugadores y ese equipo. No olvide que nosotros aún no eramos nadie e íbamos a jugar unos cuartos de final de la UEFA contra el mejor equipo del mundo. Pero en 2006 todo cambió. En un PSG-Hapoel de Tel Aviv de la UEFA hubo enfrentamientos entre ambas aficiones y murió un aficionado nuestro por un disparo de la Policía. Ya han pasado nueve años de aquello pero aún sigue latente. Desde entonces, el ambiente en el Parque de los Príncipes sigue siendo bueno pero mucho más calmado que en los años noventa. Ya no hay tanta pasión en las gradas. Ahora es más una afición de champagne y caviar.

¿Cristiano o Ibrahimovic?

Cristiano tiene tres Balones de Oro y acaba de ganar su cuarta Bota de Oro. Qué puedo decir yo más aparte de eso. Es un ganador las 24 horas del día, incluso cuando duerme gana. Cada mañana, cuando me levanto y sé que va a jugar Cristiano, sonrío. Ibrahimovic tiene ahora 34 años y aunque sigue siendo uno de los mejores del mundo, creo que su carrera ya va cuesta abajo. No hay color entre ambos. Pero creo que estoy diciendo algo lógico. De cada diez personas que le preguntes si es mejor futbolista Cristiano o Ibra, nueve te dirán que Ronaldo.

¿Es difícil entrenar al Madrid?

No hay termino medio cuando eres técnico del Real. O blanco o negro. Siempre tendrás a los mejores jugadores del mundo y tu única obligación será ganar títulos. Tan fácil pero tan difícil. Benítez creció en ese club y sabe mejor que nadie que o gana o a la calle. Mire dónde está Ancelotti, y eso que ganó la Décima un año antes.

Ahora ejerce de presentador y comentarista de la Ligue 1 y de la Premier en Canal +, ¿volverá a ser candidato a la presidencia de la FIFA?

Lo estoy meditando seriamente. Hay muchos cosas que huelen a podrido. Hay que sacar del fútbol a los señores de traje y corbata. Ahora mismo UEFA y FIFA están regidos solo por intereses económicos y lo que tenemos que acometer son profundos cambios y devolver el fútbol a los hinchas, que son los que realmente hacen que este deporte sea el mejor del mundo. Tenemos unos dirigentes que lo único que les importa es encontrar el modo para hacerse lo más rico posible y esto debe llegar ya a su fin.