La ONU denuncia posibles ejecuciones extrajudiciales durante las protestas en Nicaragua

La Cruz Roja ha registrado nueve fallecimientos desde que estallaron las protestas el 18 de abril, mientras que el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) ha informado este lunes de al menos 25 muertos. La ONU tiene datos «creíbles» que hablan también de 25 fallecidos –aunque otras fuentes apuntan a que superarían la treintena–, y ha expresado su «preocupación» por el gran número de heridos, alrededor de 400 , y detenidos, dos centenares, según cifras publicadas de la Comisión Permanente de los Derechos Humanos (CPDH). A esto se sumaría la desaparición de al menos 65 personas.

«Es esencial que se investiguen de forma eficaz todas las acusaciones de un uso excesivo de la fuerza por parte de la Policía y otras fuerzas de seguridad, para garantizar que los responsables rinden cuentas», ha declarado la portavoz del Alto Comisionado, Liz Throssell . El llamamiento se extiende también para analizar los «actos de violencia», como por ejemplo saqueos, que se han cometido en el marco de las protestas, informa Ep.

La portavoz del Alto Comisionado instó a las autoridades nicaragüenses a cumplir con las «obligaciones internacional» y garantizar la labor tanto de los activistas como de los medios (anteriormente denunció la censura del gobierno contra canales de televisión). Además, ha pedido respeto para las libertades de expresión y de reunión, si bien recordó a los manifestantes la necesidad de llevar a cabo cualquier acto «pacíficamente».

A pesar de la retirada, el pasado dmingo, de la polémica reforma de las pensiones por parte del Gobierno, las protestas contra Ortega no han amainado, si no todo lo contrario.

Este lunes tuvo lugar una multitudinaria manifestación, convocada por la patronal nicaragüense del Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP) bajo el lema «Caminata por la paz y el diálogo», en la que cientos de miles de personas exigieron la dimisión del presidente y el fin de la represión.

«¡Qué se vaya Ortega!, Qué renuncie ya!», «Las calles son del pueblo y no del Frente Sandinista», «El pueblo despertó» eran algunas de las consignas que rezaban las miles de pancartas que portaban los manifestantes bajo un sol inclemente y portando la bandera nacional azul y blanca y las fotografías de los estudiantes asesinados en los últimos seis días.

Los estudiantes, los primeros en iniciar las manifestaciones , han sido los impulsores de un nuevo liderazgo al que se ha sumado la patronal, antes aliada del gobierno de Ortega. «Las protestas ya no son sólo por el INSS, son en contra del Gobierno que nos niega la libertad de expresión, la libertad de prensa y de manifestarnos pacíficamente», declaró a la prensa local Clifford Ramírez, uno de los estudiantes que ha participado en las protestas desde el inicio.