Los socialistas europeos se quedan solos defendiendo la amnistía

Kyuchyuk publicó un mensaje en redes sociales con motivo de la aprobación ayer de la ley de amnistía en la Comisión de Justicia del Congreso en el que decía que se trataba de «un día triste para los liberales y para la UE». Para este dirigente búlgaro, «una amnistía, hecha a medida para borrar los crímenes cometidos contra los políticos a cambio de sus votos, socava los valores fundamentales de la democracia liberal. Si la Justicia no es igual para todos, no es justa. Los liberales defienden el Estado de derecho en España».

Ayer también se conoció que el grupo socialista no ha podido impedir que se apruebe la petición de comparecencia del comisario Didier Reynders en la comisión LIBE, precisamente para pedirle que explique la posición de la Comisión Europea ante esta ley de amnistía, de la que ya el año pasado dijo que «seguimos muy de cerca» en una carta al ministro del ramo, Félix Bolaños, pero que no se pronunciaría hasta que no haya sido aprobada.

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Aunque el presidente de esta comisión parlamentaria es el exministro socialista español Juan Fernándo López Aguilar, ni siquiera con el apoyo de los grupos de extrema izquierda han podido impedir que se aprobase esta solicitud de comparecencia, propuesta la semana pasada por el PPE. También se espera que asistan a esta sesión algunos miembros de la Comisión de Venecia, que está finalizando un informe sobre la amnistía, cuyo borrador fue utilizado por el Gobierno de Pedro Sánchez para difundir información falsa sobre su contenido. Aunque no hay fecha todavía para esa comparecencia, el eurodiputado popular Javier Zarzalejos dijo confiar en que se celebre lo antes posible, ya que «se trata de una cuestión grave y urgente que la Comisión Europea tiene que abordar sin demora».

En paralelo, la semana que viene también está previsto que se apruebe formalmente el informe definitivo de la propia Comisión de Venecia sobre la amnistía en España, que probablemente recogerá el grueso de los argumentos ya conocidos en el borrador que el Gobierno se apresuró a filtrar, en contra de las reglas de este organismo, que pertenece al Consejo de Europa. La sesión está prevista para los próximos viernes y sábado.

Además, Reynders ha convocado para el próximo miércoles a los representantes del PSOE y PP, el propio Bolaños y Esteban González Pons, respectivamente, para una tercera reunión con el objetivo de desbloquear la situación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

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El comisario europeo de Justicia pide a los dos partidos que aprueben los nombramientos necesarios «e inmediatamente después» una reforma de las reglas de elección para que se adapten a los estándares europeos y atribuyan a los propios jueces esta misión. Dado que el PSOE se niega en redondo a cambiar esas reglas, las perspectivas de acuerdo ya eran bastante escasas antes de que se aprobase en comisión la ley de amnistía, pero después de que el Gobierno socialista diera este paso parece prácticamente imposible.

«Es muy difícil llegar a un acuerdo sobre el CGPJ con alguien que al mismo tiempo está humillando, desautorizando y obligando al Tribunal Supremoa corregirse, rompiendo la división de poderes. No vamos a permitir que con una mano ataque a los jueces con Junts y con la otra los defienda con el PP. El Gobierno tiene que elegir bando», ha advertido ya el popular Pons.