Ayuso y Aguado escenifican la paz para cerrar 2020: «Me volvería a casar con este Gobierno»

«Yo me volvería a casar con este Gobierno», avanzó la presidenta con una sonrisa, aunque luego lo matizó, acaso por las crisis que ha vivido con su socio: «Yo lo haría, no sé, luego que responda él, yo lo haría desde luego» . Aguado no dudó y aseguró, al menos de palabra, la continuidad de la coalición para un año que está llamado a ser clave, el de la recuperación tras la pandemia. «Hay que firmar lo que haga falta si eso da un plus de confianza a los ciudadanos, yo creo que eso es lo que necesitan en momentos de incertidumbre; saber que tienen un Gobierno en coalición pero que funciona , puede tener a veces distintos puntos de vista, pero la inmensa mayoría de las veces estamos de acuerdo», añadió el vicepresidente.

Este particular «sí quiero», una especie de reconciliación un año y medio después de la investidura, trató de dejar atrás la batalla abierta e indisimulada que han mantenido los dos dirigentes antes y durante la crisis del coronavirus, con episodios límite como la gestión de las residencias de mayores y los reproches y filtraciones cruzados entre el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, y su homólogo de Políticas Sociales, Alberto Reyero, ya fuera del Ejecutivo.

Tanto Ayuso como Aguado, que lloró al recordar las víctimas, hicieron hincapié en que sus diferencias entran dentro de la normalidad de un pacto de esta naturaleza. «Como todos los Gobiernos de coalición, tiene sus dificultades, pero hoy mismo firmaría un compromiso para los próximos tres años. Estoy con quien quiero y donde quiero, estoy muy orgullosa e ilusionada. La Comunidad de Madrid va a ser una comunidad todavía más importante», aseguró Ayuso.

Esta suerte de compromiso se recordará seguro cuando la izquierda resucite la posibilidad de una moción de censura, para la que Ciudadanos es fundamental por la composición de la Asamblea. También pesará sobre la mesa lo hecho durante este año. Presidenta y vicepresidente, precisamente, presumieron ayer de avances muy criticados por la oposición, como la construcción del Hospital Isabel Zendal, la estrategia contra el coronavirus o la defensa de la fiscalidad de Madrid frente a Pedro Sánchez.