Vega: Una 'app' capaz de avisar ante situaciones y patrones de violencia machista

La herramienta fue presentada ayer en la ciudad olívica y aspira, indican sus promotores, a marcar «un antes y un después en la lucha contra esta violencia». David Calvo y Manuel Montenegro son, junto a Rubén Gardón y Jorge Fernández, inversores tecnológicos radicados en Suiza, los padres de este sistema que pone a las víctimas en el centro para apoyarlas y protegerlas de un modo discreto. Su objetivo es triple: reducir al máximo el tiempo de reacción policial, facilitar la obtención de pruebas de cara a un proceso judicial y empoderar a las víctimas. A la hora de diseñarlo, reconocieron ayer, tuvieron muy presente su experiencia personal y el conocimiento de los protocolos actuales. «Conocemos de primera mano las limitaciones del sistema actual» introdujeron sus creadores para constatar que Vega no es solo un producto tecnológico, sino «una herramienta basada en experiencias reales y con un enfoque humano».

Pero, ¿cómo funciona? La app se divide en dos bloques. El primero de ellos proporciona a las usuarias asistencia informativa inmediata sobre los pasos a seguir en caso de sentir que está viviendo una situación de maltrato. Entre otras, ofrece un canal de comunicación discreto y directo con las autoridades competentes y puede instalarse en móviles o relojes inteligentes sin dejar un rastro visible que pueda alertar al agresor. En el bloque que sus ideadores llaman «reactivo», Vega entra en juego para proteger a la usuaria en cuestión de segundos. Ante un escenario de peligro, se activa de forma automática sin necesidad de ninguna acción por parte de la mujer. Un elemento clave a la hora de salvar vidas si se tiene en cuenta que muchas agredidas sufren un fenómeno conocido como 'inmovilidad tónica' que impide que griten o se muevan a causa de una sensación de miedo extremo. En caso de agresión, Vega da voz a la víctima abriendo el micrófono de su dispositivo para grabar en tiempo real lo que está sucediendo y remitirlo a una central receptora de alarmas, acompañado de una localización GPS. Además, se genera un archivo digital seguro que allana mucho el camino de cara a una denuncia y que sirve para conservar pruebas en caso de que se abra un proceso judicial.

Entre las características más novedosas de esta app ideada en Galicia y desarrollada de manera íntegra en Suiza está el empleo que hace de la Inteligencia Artificial. En este caso, la emplea para radiografiar lo que está escuchando a través del micro e identificar si es un patrón de riesgo, tomando como referencia el mero entorno conversacional. Así, señalan sus promotores, se evita que la víctima tenga que interactuar directamente con el teléfono o el reloj en situaciones de máxima tensión.

«Cada minuto que se gana puede ser la diferencia entre la vida y la muerte» destacaron ayer sus impulsores sobre un producto que actualmente se encuentra ya en una fase avanzada de pruebas piloto y que cuenta con el interés de instituciones públicas, cuerpos de seguridad y entidades especializadas en la atención a las víctimas. Sobre su diseño, una de las cuestiones que más preocupan, explican que es muy sencillo y que la hace fácilmente manejable en distintas realidades sociales.