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Tribunales

Crimen de la viuda de la CAM: el verdadero asesino de María del Carmen Martínez sigue en la calle

El Supremo anula la sentencia absolutoria del asesinato de la viuda de la CAM y el juicio se repetirá

Imagen de archivo de María del Carmen Martínez junto a su marido, Vicente Sala JUAN CARLOS SOLER
Toni Jiménez

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Es preferible dejar a un culpable en la calle que a un inocente en prisión. Ese fue el mensaje que la magistrada de la Audiencia de Alicante Francisca Bru, la juez que ha llevado el caso por el asesinato de la viuda del expresidente de la CAM , quiso trasmitir a los miembros del jurado popular que ha enjuiciado la causa. Lo cierto es que tras tres años inmersos en un proceso muy mediático que ha sacado a relucir las diferencias irreconciliables de los descendientes de Vicente Sala, una duda sigue planeando en el aire: ¿quién mató a María del Carmen Martínez?

El veredicto del tribunal en el que seis de sus nueve miembros consideraban «no culpable» al único acusado en todo este tiempo -Miguel López, yerno de la víctima- y que desembocará en una sentencia absolutoria -que podrá ser recurrida- dentro de entre tres y diez días, abre de nuevo todo tipo de especulaciones.

La guerra abierta en el seno de los Sala por los negocios propiedad de la matriarca -valorados en alrededor de cien millones de euros- fue el primero de los móviles que se pusieron encima de la mesa. Una parte de la familia veía amenazada su estabilidad económica con el traspaso, por parte de la víctima, de todas sus empresas a su primogénito, Vicente Sala, en detrimento de sus otras tres hijas y sus cónyuges.

A María del Carmen Martínez «una persona desconocida» , según el fallo del jurado, le asestó dos tiros en la cabeza el 9 de diciembre de 2016 que le provocaron entre 10 y 25 minutos de agonía -no hay consenso- hasta la muerte. La encontró, todavía con vida, uno de sus trabajadores en el lavadero del concesionario del que era dueña y que regentaba López, casado con una de sus hijas y detenido dos meses después como el principal sospechoso del crimen. Fue puesto en libertad provisional bajo fianza de 150.000 euros semanas más tarde.

Imagen de Miguel López, durante el registro en el concesionario JUAN CARLOS SOLER

El hijo mayor de los Sala acabaría comprando a sus hermanas la parte del pastel que les correspondía a mediados de 2018 por 54 millones de euros. La venta materializó la ruptura definitiva del clan, enfrentado también en los tribunales al personarse Vicente en el juicio como acusación particular y pedir -junto a la Fiscalía- más de 24 años de prisión para su cuñado, Miguel López, por un delito de asesinato y otro de tenencia ilícita de armas.

López defendió su inocencia, solicitó su absolución en todo momento y ahora el jurado lo exonera también de ese segundo delito al no ver acreditada la autoría del asesinato . Precisamente, el arma con el que se cometió el crimen nunca ha aparecido . Y como esa, muchas de las pruebas que sustentaban el relato que salió de la investigación policial se han ido desmoronando como si de un castillo de náipes se tratara mientras se sucedían las declaraciones de un centenar de personas en las 17 sesiones del juicio.

El ADN y la cronología del crimen

El análisis de las muestras de ADN recogidas en el concesionario Novocar, escena del crimen, determinó que todas ellas pertenecían a la fallecida, excepto una en la mano derecha que no se pudo identificar pero que correspondía a un varón sin ficha en la base de datos policial. Además, las balas que fueron intervenidas a López no correspondían con las que se dispararon contra su suegra . Tampoco se encontraron residuos en sus manos o en la ropa. Incluso, se ha dudado de sí tuvo o no tiempo de hacerlo sin ser visto.

Imagen de Miguel López tomada este domingo en Alicante EFE

Los forenses no son capaces de establecer una cronología horaria exacta de los hechos que hubiera resuelto más facilmente la ecuación. La persona que cometió el crimen utilizó un silenciador, por lo se desconoce el momento en el que la víctima recibió los dos disparos en la cabeza cuando estaba sentada en su vehículo y el tiempo, por tanto que había transcurrido hasta que a las 19.05 horas, un trabajador del taller la encontró apoyada en su todoterreno agonizando. Lo que sí se sabe es que Miguel le había entregado las llaves del coche media hora antes . Después, se marchó a su domicilio. Tampoco se ha podido demostrar que el yerno contratara a un sicario para que cometiera el delito por él.

La sentencia absolutoria pondrá punto y aparte a un largo proceso que ha generado mucha expectación social y mediática, pero no cerrará del todo el círculo que se abrió hace tres años. La Fiscalía y la acusación particular, ejercida por el primogénito del matrimonio Sala-Martínez, Vicente Sala, solicitaban para López una pena de 24 años de prisión por el delito de asesinato y posesión ilegal de armas.

El Ministerio Público sostiene que decidirá si recurre el veredicto del jurado una vez conozca el contenido de la sentencia absolutoria . En todo caso, aclara que la decisión de formular acusación contra López estaba fundamentada en el resultado de la investigación policial, donde «había hasta veintitrés indicios sobre que pudo ser el autor o instigador del delito».

Mientras, el caso que convulsionó hace casi tres años a la sociedad alicantina sigue sin despejar la gran incógnita. El asesino o asesina de María del Carmen Martínez sigue en la calle.

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