La L1 de Metro de Barcelona, cortada en verano de Clot a Fondo

Además, la Conselleria de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat ejecutará este verano otros trabajos que implicarán suspensiones parciales de servicio: en la L2 entre Paral·lel y Sagrada Família, y en la L5 entre Can Vidalet y Collblanc. La interrupción en la L2 será entre el 27 de julio y el 30 de agosto por mejoras en las condiciones mecánicas de la vía, y en la L5 serán del 29 de julio y el 1 de septiembre, por obras relacionadas con la futura estación de Ernest Lluch.

TMB ha descartado habilitar un bus lanzadera como alternativa principal al corte de la L1 por «tanto el volumen de pasaje como la configuración de la trama viaria», y recomienda aprovechar la red de transporte existente en el distrito barcelonés de Sant Andreu y en Santa Coloma de Gramenet, como la L9 Nord y trenes de Rodalies. Sí habilitará dos servicios especiales de autobús para enlazar estos transportes ferroviarios y las paradas cerradas de la L1: uno irá de Clot a Fabra y Puig y el otro de Onze de Setembre a Fondo, y tendrán una frecuencia de paso en horas punta de tres y cinco minutos, respectivamente. Estos autobuses especiales, que no estarán conectados entre sí, permitirán enlazar con el Metro y funcionará con el mismo horario, ha señalado TMB, que promueve desde este mismo lunes una campaña informativa en toda la red y varios canales dado el «alcance y la complejidad» de la actuación.

Esta actuación en la L1 pretende modernizar más de nueve kilómetros de vías, aparatos e instalaciones en el tramo desde Clot a Baró de Viver, en la operación de mantenimiento extraordinario más importante realizada en la red, ha asegurado TMB. Estos trabajos actualizarán un sector de túnel que tiene 65 años de antigüedad que pasa por debajo de la Meridiana, y otro de 51 bajo el barrio de Sant Andreu, y renovará toda la vía montada ahora sobre balasto -la capa de piedras en la zona de vías- por placa de hormigón.

También se renovarán y ampliarán los dispositivos que permiten realizar maniobras y cambios de sentido de los trenes, así como la señalización ferroviaria, y se añadirán funcionalidades con vista a l futuros incrementos de oferta. TMB ha destacado que la ejecución de estos trabajos es de «una elevada complejidad» -implica abrir tres pozos de extracción y entrada de materiales-, por lo que resulta incompatible con la circulación de trenes.

Tras estudiar «todas las opciones», han optado por concentrar las obras en el mínimo de tiempo -estos dos meses- coincidiendo con la época de menos movilidad urbana, y afectando al tramo entre Clot y Fondo, mientras que el resto de la línea -de Clot a Hospital de Bellvitge- funcionará con normalidad.