El Gobierno regional impulsa la presencia de la mujer en el sector agroalimentario

El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, así lo ha indicado este miércoles durante la visita que ha realizado, junto con la consejera de Igualdad y portavoz, Blanca Fernández, a las instalaciones de la cooperativa Ángel del Alcázar de Villacañas (Toledo), donde han sido recibidos por su presidenta, María Jesús Rincón; el vicepresidente, Cayetano Irala; y miembros de la junta directiva, y en la cual han estado acompañados por el alcalde de la localidad, Jaime Martínez, así como el delegado de la Junta en Toledo y el de Agricultura en la provincia, Javier Úbeda y Jesús Fernández, respectivamente.

Esta visita simbólica a una cooperativa presidida desde hace más de ocho años por una mujer , es un ejemplo de los pasos que se dan en pro de la igualdad real de género. En datos, por ejemplo, en este municipio se han incorporado desde 2016 un total de 21 jóvenes a la agricultura, diez de ellas mujeres; hay dos proyectos de titularidad compartida y ya existe un 15 por ciento de mujeres gerentes en las cooperativas. Se va, ha dicho Martínez Arroyo, «de lo grande a lo pequeño, de lo lejano a lo cercano, para que veamos la realidad en el territorio de las medidas y los efectos que las medidas tienen en la realidad gracias esfuerzo de todos».

Según Martínez Arroyo, «no es fruto de la casualidad, es fruto del trabajo y del compromiso y la creencia de que es posible un mundo mejor en el que las mujeres, lógicamente, tomen decisiones igual que lo hacen los hombres».

Así, ha destacado el compromiso Gobierno regional con el medio rural, con el sector agroalimentario, el mundo cooperativo y la lucha por la igualdad de género «donde estamos todos implicados».

El consejero ha destacado de María Jesús Rincón el excelente trabajo realizado. «Ella representa que es posible cambiar el enfoque de las cosas y podemos hacerlo contando con mitad sociedad que son las mujeres. Tienen que estar presentes en la toma decisiones». Y por eso se impulsó en Castilla-La Mancha de la Ley del Estatuto de las Mujeres, que está teniendo efectos reales con los pasos de Cooperativas Agroalimentarias o UPA, que cuentan ya con una composición paritaria en sus órganos de dirección.

En esta línea, y tal como recoge el propio Estatuto, ha explicado «todas organizaciones agrarias o asociaciones que quieran trabajar con el Gobierno deben lograr esa equiparación de sexo en un periodo transitorio de 4 años». O lo que es lo mismo, a finales de 2023 deberán tener al menos 40 por ciento de mujeres en sus órganos de dirección.

Además de la Ley del Estatuto de las Mujeres Rurales, Martínez Arroyo ha resaltado otras medidas adoptadas por el Gobierno y que se llevan a cabo desde la Consejería, tales como la priorización a todos los proyectos de mujeres, de titularidades compartidas, o los proyectos donde partiendo de empresas, son proyectos donde las mujeres representan más del 50 por ciento del capital de la empresa o de sus órganos de dirección.

En el encuentro, además, se ha analizado la situación actual por la que pasa el sector del vino y la forma de afrontar los próximos meses, trabajando en la búsqueda de soluciones, y resolver la situación a corto plazo y también a medio y largo plazo. En este sentido, ha resaltado que «necesitamos fortalecer la estructura comercial y la integración comercial de estas empresas y una mayor capacidad de negociación en marcado global en el que competimos y es difícil la diferenciación» del producto.

De esta forma, ha resaltado que se necesita una Ley del Vino de Castilla-La Mancha, en la que se trabaja actualmente con el sector, «para de verdad dotar al propio sector de herramientas suficientes para tomar decisiones y modificar las situaciones de mercado cuando estas son adversas».

Por su parte, la consejera de Igualdad y portavoz del Gobierno regional, Blanca Fernández, ha destacado la figura de la presidenta de la cooperativa, María Jesús Mora, una de las doce mujeres que presiden una cooperativa en la región, «lo indica que sigue siendo un sector muy masculinizado y que es necesaria la incorporación de las mujeres a la actividad agraria y al mundo de los cooperativistas».

Y es que tal como ha recordado la consejera, el 60 por ciento de las mujeres de Castilla-La Mancha viven en la zona rurales , y en la medida en que los sectores productivos están muy masculinizados, «las mujeres tienen menos oportunidades y no hay que dejar bajo ningún concepto que tengan que abandonar sus pueblos porque si lo hacen, en un corto plazo de tiempo los pueblos envejecen».

Para evitar este extremo, Blanca Fernández ha explicado que la estrategia del Gobierno regional pasa por «apuntalar el destino y el futuro de las mujeres en el medio rural”. Un hito en este camino fue la aprobación del Estatuto de las Mujeres Rurales con el que se están implementando medidas de acción positiva en las zonas rurales, a lo que hay que sumar que el conjunto de las consejerías tienen medidas de acción positiva “para impulsar esa igualdad de género por la que trabajamos a diario, aunque el Estatuto de las Mujeres Rurales es muy importante porque como decía más del 60 por ciento de las mujeres de Castilla-La Mancha vivimos en pueblos menores de 30.000 habitantes».

Blanca Fernández ha subrayado el «claro compromiso feminista» del consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural y del departamento que dirige, «lo que se traduce en políticas concretas» que están permitiendo mejorar la incorporación de las mujeres tanto a las labores del campo como a sus órganos de representación.

La consejera de Igualdad y portavoz ha detallado que las mujeres son el 24 por ciento de la base social de las cooperativas y el 9 por ciento de los consejos rectores, «datos que nos dicen que tenemos que seguir impulsando la participación de las mujeres en los consejos rectores que en definitiva son equipos de gente del pueblo que quiere que el pueblo funcione a través de la actividad agraria y del trabajo cooperativo».

También ha explicado que a pesar de que solo el 9 por ciento de los miembros de los consejos rectores de las cooperativas son mujeres, «somos la comunidad autónoma que más consejeras tiene de toda España, 355, a muchísima distancia de la segunda». De la misma manera ha indicado que con 193, Castilla-La Mancha es la segunda región con más explotaciones con titularidad compartida.

Finalmente, Blanca Fernández ha recordado otras medidas de acción positiva de la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural como primar la incorporación al campo de las mujeres, una medida concreta en el relevo generacional y en la mejora de explotaciones agrarias, que ha servido para duplicar duplicado el número de mujeres que se han incorporado al relevo generacional, «lo que no solo es bueno para las mujeres sino para el conjunto de la sociedad porque interesa parar la sangría de la despoblación y eso tiene mucho que ver con que en las zonas rurales las mujeres tengan presente y sobre todo tengan futuro, porque como las mujeres no tengamos futuro en los pueblos, es muy difícil que los pueblos puedan tener realmente un futuro viable».