Asesinan a tiros a un hombre en plena calle de Lugo de Llanera (Asturias) tras tenderle una trampa por un posible ajuste de cuentas

El tiroteo se produjo a la altura del kilómetro 2,9 de la carretera AS-374, hasta donde se desplazaron varias patrullas de seguridad ciudadana de los Puestos de Piedras Blancas y de Noreña. Los agentes se encontraron allí un coche con agujeros de bala y dentro el cadáver de un hombre de 43 años de edad, cuya identidad no ha trascendido más allá de que es de origen panameño, según informa 'El Comercio'. Además, también se hallaron en las inmediaciones en el lugar varios casquillos de bala de una pistola.

Los vecinos de la zona (las primeras casas de la localidad se encuentran a unos 200 metros del lugar de los hechos) escucharon hasta cuatro detonaciones (que luego resultaron ser disparos) en torno a la media noche del sábado 25, momento en el que muchos se asomaron a las ventanas y vieron un coche blanco cruzado en medio de la carretera delante de otro, que resultó ser el de la víctima.

Lo que parecía un accidente de tráfico al uso resultó ser algo mucho más complicado. En cuanto los agentes llegaron al lugar se encontraron no solo el vehículo con varios agujeros de bala, sino también las cuatro ruedas rajadas y el cadáver en su interior.

'El Comercio' ha desvelado la primera vía de investigación de los agentes tras estudiar la sucesión de los hechos. La víctima era un viejo conocido de la zona, aunque ya no vivía en Asturias, y en concreto de las autoridades policiales, dado que contaba con antecedentes y un historial de detenciones. De hecho, regresó al concejo de Lugones exclusivamente para tener un encuentro con unos conocidos.

Ese encuentro en un local de ocio de Lugones acabó de manera abrupta, ya que la víctima volvió a su coche e, inmediatamente después, le empezaron a seguir varias personas en el citado coche blanco. El hombre se detuvo en un bar de Lugo de Llanera, momento en el que los atacantes le rajaron las ruedas del coche y se escondieron para, posteriormente, asaltarle en el lugar del asesinato.

Con estas pesquisas, todo apunta a un ajuste de cuentas.