Un verano de precios récord: habitaciones de hotel, apartamentos y billetes de avión se disparan
Las tarifas de los alojamientos son un 25% superiores a las de hace un año
El incremento de precios y de turistas disparará a los bares a su récord de ventas este verano
El sector turístico espera un verano de rércord en visitantes e ingresos
El verano de 2023 va camino de ser histórico para el turismo. Nunca antes ha habido una previsión tan buena de ingresos en el sector. Y no es por que se esperen muchos más turistas de los que vinieron antes de la pandemia, sino porque ... se prevé que la factura que estos paguen por veranear, tanto españoles como extranjeros, sea récord. Como dato de referencia, el de los hoteles. Según la plataforma de comercio hotelero SiteMinder, los precios medios de las habitaciones para la temporada estival están ya un 25% por encima de las del año pasado y un 12% al alza respecto a 2019.
Son precios que los hoteleros insisten en que son derivados de la escalada de costes energéticos y de los alimentos. Una coyuntura que también afecta a las familias españolas y europeas de manera rutinaria desde hace casi dos años. Pero no consiguen, por el momento, trastocar sus planes de descanso. Según Siteminder, el número de reservas en los alojamientos españoles en el inicio del verano está un 17% por encima que en el inicio de la época estival de 2019, el año con el récord actual de movimientos turísticos para nuestro país. Esto se explica por la prácticamente plena recuperación de los viajeros internacionales, que copan el 55% de las reservas.
Será por tanto un verano inolvidable para toda la cadena de valor del sector turístico. No tanto, sin embargo, para el turista, que tendrá que hacer un esfuerzo económico notorio para disfrutar de unos días fuera de casa. «En algunos casos se han modificado los hábitos de consumo restando días de viaje y optando por alojamientos más económicos», explica el secretario general de la Mesa del Turismo, Carlos Abella.
Son precios muy altos, pero el sector sigue defendiendo, un año más, que son tarifas a las que no se ha trasladado la totalidad del aumento de costes que sufren las empresas, «gracias a la recuperación de la demanda», explica Abella. En mayo, visitaron España 8,2 millones de turistas internacionales, un 17,6% más que en el mismo mes de 2022 y un 3,8% más que en mayo de 2019, antes de la pandemia. El mejor quinto mes del año de la historia en cuanto a visitas de foráneos (en abril también se batió récord),según ha confirmado hoy el INE.
En los últimos tiempos incluso algunos agentes turísticos han llegado a insinuar que el aumento de precio restaría competitivad a España como destino frente a nuestros competidores. Abella lo descarta. «El turista extranjero sufre la inflaicíon igual, pero siguen viendo a España como un destino muy competitivo por la alta calidad de las instalaciones y servicios y con unos precios muy razonables», apostilla, a la vez que añade que si que podría afectar a futuro a la llegada de turistas internacionales «si no se contiene el incremento de la inflación».
Tampoco será asequible alquilar un apartamento en la costa este verano, una de las opciones predilectas, sobre todo para el turista patrio. Este año cada semana en la playa costará de media 1.055 euros (el año pasado la media fue de 1.016 euros) , según Tecnitasa, que detecta algunas zonas donde la tarifa media es de 3.000 euros como sucede en Puerto Banús (Marbella,Málaga) o Santanyi (Baleares).
Los billetes de avión se disparan
Los altos precios también llegan del lado de las aerolíneas, que es la modalidad de transporte por la que llegan más turistas extranjeros a nuestro país. Las compañías aéreas justifican los altos precios de los billetes por el aumento de costes en las partidas de combustibles.
La previsión es que los billetes sigan al alza. Aunque no se dispone de un dato para este verano, según la edición de 2023 del Global Business Consulting que elabora American Express Global Business Travel, los vuelos intraeuropeos subirán un 6% durante 2023.
Las compañías aéreas podrían enfrentarse a un cambio de ciclo. La aerolínea de bajo coste por excelencia, Ryanair, está cambiando el discurso respecto a su política de tarifas, «la era de los vuelos low cost ha terminado», llegó a decir su consejero delegado, Michael O'Leary hace meses. Por lo que será complicado volver a ver tarifas como las de antaño.