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Kamera, la oscura fábrica de venenos del Kremlin y el Mengele ruso

Una «industria de la muerte a pequeña escala», es el brazo invisible con el que la maquinaria estatal rusa siembra el terror y silencia a los disidentes

Kamera perfeccionó la letalidad de los distintos tipos de veneno
Alexia Columba Jerez

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«A nuestros líderes siempre le han interesado los venenos», aseguraba Pavel Sudoplátov, jefe de espionaje de Stalin. Estuvo en la Guerra Civil española y reclutó a Ramón Mercader para asesinar a Trotski. Fue el autor del libro ‘Operaciones Especiales’ , en ... el que desvelaba lo que pasaba en los pasillos de la Unión Soviética. Él mismo declaró haber sido testigo de las purgas estalinistas, de robar los secretos de la bomba atómica y de hacer parecer como muertes naturales las ejecuciones por envenenamiento del Gobierno. Y aseguraba: «Los laboratorios de toxicología son un componente lógico de los servicios de apoyo técnico de cualquier organismo de seguridad, pero el peligro está en que un arma tan silenciosa y potente pueda ser manipulada en interés del autoritarismo».

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