Hazte premium Hazte premium

Islas Kuriles: el otro frente con el que Putin quiere desestabilizar sigilosamente a Occidente

El archipiélago, en disputa con Japón y ocupado ahora por Rusia, es una posición clave en el Pacífico y sirve para unir fuerzas con China

Un guardia fronterizo ruso apunta a bordo de una lancha patrullera frente a la isla de Tanfilyeva, parte de las Islas Kuriles Reuters
Alexia Columba Jerez

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Rusia agita las aguas del Pacífico y las maniobras que está llevando a cabo conjuntamente con China han encendido las alarmas de los más atentos. Es una llamada de atención y viene a poner sobre la mesa que los peores temores de Japón no eran infundados. Las autoridades niponas han acusado a Rusia de «ocupar ilegalmente» las islas Kuriles. Hecho que señala en su Libro Azul diplomático, que es un informe que recoge la voz del gobierno japonés sobre lo que sucede en el mundo. Putin en respuesta ha aumentado la presencia militar en la zona.

Islas

Kuriles

Mar

de Ojotsk

500 km

Shumshu

Kamchatka (Rusia)

Atlasov

Antsiferova

Paramushir

Makanrushi

Onekotan

Ekarma

Kharimkotan

Chirinkotan

Sajalín (Rusia)

Shiashkotan

Raykoke

Matua

Ushishir

Broutona

Rasshua

Chirpoyev

Ketoy

Brat

Simushir

Urup

Kunashir

Iturup

Shikotan

Océano Pacífico

Hokkaido (Japón)

Islas Habomai

Movimiento de fronteras

Japón

URSS / Rusia

Tratado de

Shimoda

Tratado de

San Petersburgo

Tratado de

San Francisco

Rusia

Rusia

Rusia

Mar

de Ojotsk

Mar

de Ojotsk

Mar

de Ojotsk

1875

Rusia

Rusia

Rusia

1855

Océano

Pacífico

Océano

Pacífico

Océano

Pacífico

Japón

Japón

Japón

1945 - hoy

ABC

Islas Kuriles

Mar

de Ojotsk

Kamchatka

Rusia

Shumshu

Atlasov

Paramushir

Antsiferova

Sajalín

Rusia

Onekotan

Makanrushi

Kharimkotan

Ekarma

Chirinkotan

Shiashkotan

Raykoke

Matua

Ushishir

Rasshua

Broutona

Chirpoyev

Ketoy

Brat

Urup

Simushir

Kunashir

Iturup

Océano

Pacífico

Shikotan

Islas Habomai

Hokkaido

Japón

250 km

Movimiento de fronteras

Japón

URSS / Rusia

Tratado de Shimoda

Mar

de Ojotsk

Rusia

Rusia

1855

Océano

Pacífico

Japón

Tratado de San Petersburgo

Mar

de Ojotsk

Rusia

1875

Rusia

Océano

Pacífico

Japón

Tratado de San Francisco

Rusia

Mar

de Ojotsk

Rusia

Océano

Pacífico

1945 - hoy

Japón

ABC

A Occidente las islas Kuriles pueden no sonarles de nada, pero alrededor de ellas se mueven intereses clave . Las Kuriles son una cadena de islas que se sitúan entre la península rusa de Kamchatka, al norte, y la isla nipona de Hokkaido, al sur, separando el mar de Ojotsk del Pacífico. Concretamente las cuatro islas que reclama Japón son: Kunashir, Shikotan, Iturup y Habomal. Y se refieren a ellas no con la denominación rusa de Kuriles, sino como Territorios del Norte.

José Luis Fiori decía: «Quien tiene el poder mundial no es quien controla directamente el 'corazón del mundo', es quien es capaz de cercarlo», algo que Estados Unidos había conseguido, pero ahora Rusia y China están alterando el statu quo de la zona

Como explica Federico Aznar, analista del IEEE, «el conjunto del mar de China se encuentra constreñido por un perímetro que se conoce como 'primera cadena de islas' que arranca de las Kuriles, y está constituido por un conjunto islas, arrecifes e islotes de distinta pertenencia (China, EE. UU., Rusia, Japón) que actúan a modo de muro de contención marítimo frente a los intereses de un solo país. Es la llamada estrategia de la 'cadena de islas', un programa iniciado durante la Guerra Fría que es un cerco geopolítico ». Por ejemplo, para superar este espacio es imprescindible que China o Rusia puedan diversificar sus rutas marítimas, y es precisamente lo que ahora están haciendo ambas. Como decía el experto José Luis Fiori: «quien tiene el poder mundial no es quien controla directamente el 'corazón del mundo', es quien es capaz de cercarlo , como los Estados Unidos hizo y sigue haciendo».

Enrique Ayala, analista de la Fundación Alternativas y general de brigada retirado , señala que «esas islas hasta 1855 no pertenecían a nadie, pero ese año se firmó el tratado de Shimoda , de tal modo que desde Iturup hacia las islas del al sur eran japonesas, y el resto eran de Rusia. En 1875, a cambio de que Japón renunciara a sus derechos en la isla de Sajalín, a lo largo de la costa de Siberia oriental, Rusia cedió el resto de las islas Kuriles a Japón. Pero esto cambió al final de la Segunda Guerra Mundial , como recompensa por su labor, con el tratado de San Francisco pasaron las Kuriles a ser rusas, cosa que Japón nunca aceptó. Los japoneses decían que no se podía devolver a Rusia un territorio que nunca había sido suyo».

Más recientemente, la reforma constitucional de Rusia en 2020 que permitía a Putin a volver a presentarse, también prohibía la devolución de territorio ruso a cualquier país extranjero. Y el Gobierno ruso siempre ha temido que si las devolvía se desplegasen las fuerzas estadounidenses en ellas. Al mismo tiempo, Japón no puede recuperarlas por la fuerza, de acuerdo con la Constitución japonesa de después de la Segunda Guerra Mundial. En 1949, los 17.000 residentes japonesas en las islas fueron deportados por la fuerza. Y hasta hace poco se permitía las visitas periódicas de los familiares japoneses de los desplazados tras la guerra para rezar en los santuarios ancestrales. En retorno, Japón aceptaba a los pacientes rusos en estado crítico de las islas para que fueran tratados en su sistema sanitario. Hoy sigue la disputa, y las sanciones decretadas por Occidente, a raíz de la guerra de Ucrania, ha acrecentado el valor estratégico que tiene para el Kremlin .

Un filón geoestratégico

Estas islas controlan el acceso al mar ruso de Ojotsk, donde tienen su base los submarinos rusos de disuasión nuclear. A su vez, dan acceso a la flota rusa al Pacífico , con base en Vladivostok , y permite controlar cualquier incursión submarina extranjera. Por eso, el Gobierno ruso ha procedido a aumentar y modernizar los efectivos desplegados allí. Las Kuriles tienen además, una fuerte importancia económica , porque es una zona rica en oro, plata, hierro, titanio y metales raros , como el renio, usado para la fabricación de aviones supersónicos. Asimismo, constituye una enorme reserva pesquera, de gas y petróleo .

Y a finales de 2021 Putin aprobaba una enmienda que convertía a las islas en una zona libre de aranceles , eximiendo de impuestos a las empresas y revelando el peso comercial que la región posee. Más aun, las Kuriles pueden tener un importante papel en el desarrollo de la ruta comercial que une Europa con Asia, a través del Ártico . Cosa por la que China siente un enorme interés, ya que acortaría el tiempo de sus rutas comerciales, y pasarían por territorio aliado en el proceso. De hecho, el banco de Japón se había asociado con bancos de China y Rusia para financiar el gasoducto de Artic LNG-2 . Produciendo el doble de lo que recibe Japón con el gasoducto de Sajalín-2. Como comenta Fernando Cortiñas, profesor del IE Business School , «los países no tienen amigos permanentes, solo tienen intereses permanentes».

Desde 2014, con la anexión de Crimea los objetivos de Rusia cambiaron y Japón le impuso una serie de sanciones. Antes de eso Japón quería unir fuerzas con Rusia para controlar el crecimiento de China, pero los nipones con el paso del tiempo se fueron sintiendo más amenazados por la ambivalencia de Moscú. Una aproximación militar y técnica que aumentó con Trump y se tradujo en el despliegue de carros de combate y sistemas de misiles de defensa aérea. Y esta semana Putin ha anunciado que se realizarán una serie de ejercicios navales rusos en el mar de Japón y el mar de Ojotsk, de más de 40 buques de guerra.

Mientras, China aprovecha los recursos y la atención que se desvía a Ucrania para aumentar sus ambiciones , llegando a acuerdos con las islas del territorio. No es casual, que aviones chinos y rusos realizaran vuelos conjuntos irrumpiendo, según Japón en su espacio aéreo justo cuando Biden asistía en el país nipón a la cumbre del Quad (la alianza de Japón, Australia, India y EE.UU.) que se ha centrado en la disputa por las Kuriles y Taiwán. Por eso, el profesor Cortiñas considera que si bien en Ucrania la ayuda de China es ambigüa, esta maniobra aérea en la zona del Pacífico muestra a las claras su apoyo , lo que cambiaría sustancialmente las amenazas y reparto de fuerzas. Por todo esto, en la zona del Pacífico los intereses hierven a fuego lento, pero pueden trastocar la seguridad de Occidente.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación