España encara la mayor caída del PIB desde la posguerra

La mayor destrucción de actividad que los organismos prevén se puede dar en el trimestre que acaba de empezar y no encuentra reflejo en la serie histórica del INE en el último medio siglo. «La economía española se enfrenta al mayor “shock” de oferta y de demanda experimentado desde la Guerra Civil », señala en un informe Freemarket, que calcula que la caída de PIB en el primer trimestre será del 9,1% a lo que sucederá otro bajón del 4,7% en el segundo.

Funcas dibuja un escenario en el que las medidas de confinamiento comienzan a relajarse en mayo y junio y arroja una caída del PIB trimestral del -2,2% en el primer trimestre y del 7,7% en el segundo . Fedea, BBVA Research y la Fundación Rafael del Pino calculan que el descenso ha sido del 4,7% entre enero y marzo pero que desde abril a junio puede alcanzar el 13,5%.

Solo para contemporizar, en el primer trimestre de 2009, cuando se produjeron los peores tres meses de la crisis financiera e inmobiliaria, el hundimiento del PIB fue del 2,6%. La serie histórica del INE de crecimiento trimestral no registra una caída mayor en un trimestre desde que arranca en 1970. En términos anuales, Funcas cree que este año el crecimiento podía hundirse un 3%, pero Freemarket lo eleva a una horquilla que va del 5,6% al 10,6% en el escenario más adverso. Fedea , BBVA Research y la Fundación Rafael del Pino , por su parte, calculan una caída del -4,1% del PIB pero que puede irse al -7,9% si la situación se complica.

Es decir, se destruiría desde unos 37.000 millones en el escenario más favorable de Funcas (-3%), hasta 51.000 millones en el más optimista de Fedea , BBVA Research y la Fundación Rafael del Pino (-4,1%) pasando por los 69.000 millones del 5,6% que augura Freemarket o los 98.000 millones que supondría una caída del 7,9%. Unas caídas que se centrarían en el segundo trimestre, el que parece que puede ser el peor de todos. Para comparar, las otras recesiones que vivió España en el último medio siglo no llegaron a estos niveles: las caídas de PIB anual fueron del -0,1% en 1981, del -1% en 1993, del -3,7% en 2009, del -0,8% en 2011, -3% en 2012 y el -1,4% en 2013

«A medida que pasan los días, nos estamos acercando a los escenarios más negativos. Para que la economía “solo” cayera un 4,1% este año era contando con que el 12 de abril se levantaba el confinamiento, algo que cada vez es menos claro que vaya a pasar », señala el responsable de análisis económico de BBVA Research, Rafael Doménech, quien considera que «la economía mundial se enfrenta a una recesión que no hemos visto desde el final de la II Guerra Mundial » que también achaca a España.

Según la serie histórica de crecimiento del PIB desde 1850 del profesor de la Universidad Carlos III, Leandro Prados de la Escosura, no hay precedentes de caídas anuales de esta magnitud al menos desde la década de los cuarenta , aunque todo dependerá de si se logra controlar el virus rápidamente y se atajan futuros brotes.

La producción de servicios, principal sector de la economía española, medida por el Índice PMI se redujo a la mitad en marzo frente a febrero, al pasar de 52,1 (por debajo de 50 es indicador de recesión) a 23 puntos lo que indica una « caída sin precedentes de la actividad », señala Paul Smith, economista de IHS Markit. Tras publicar este dato, la Autoridad Fiscal actualizó su previsión en PIB en tiempo real: en el segundo trimestre pasó de augurar un -0,9% a un -1,6%. Todo ello sin conocerse aún ningún dato de abril.

Por ello, el desafío es doblar la curva de la recesión y asegurar una recuperación lo más rápida e intensa posible. El FMI calcula que cada mes de confinamiento detrae tres puntos al crecimiento del PIB. Tras el 11-S y la crisis de 2008, el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, señaló que el brote del coronavirus las superará y será «la mayor crisis económica, financiera y social del siglo XXI». Funcas augura un crecimiento del 2,8% en 2021 en el que es en el tercer y sobre todo el cuarto trimestre de este año cuando la actividad comienza a despertar.

Siendo el turismo el motor del PIB español y representando las exportaciones un 33% del PIB, gran parte de la recuperación de España dependerá de la del resto de Europa y del mundo. Pimco observa una recuperación en forma de U desde el cuarto trimestre.

Sin embargo, McKinsey idea varios escenarios en el que uno de ellos es la recuperación con forma del logo de la marca deportiva Nike, en la que la Eurozona no volverá a sus niveles precrisis hasta 2023, en el que el brote vuelve a surgir con el tiempo en determinados países. En este escenario, el PIB de la Eurozona caería un 9,8% este año. Si hay recuperación en forma de «U», la economía europea volverá a su punto anterior en el primer trimestre de 2021. Si las medidas que se adoptan tienen efecto inmediato, entonces la recuperación tendría forma de «V». «No se está ante una perturbación temporal o coyuntural, sino ante un fenómeno cuyos efectos en el horizonte del medio-largo plazo pueden ser muy negativos . Se perfila un ciclo en " L" mucho más intenso y dañino que el registrado en el período 2008-2013», advierte Freemarket.

«Hay que diseñar políticas para reiniciar la actividad económica, para que la recuperación tenga forma de V», llama Doménech, que no obstante admite que «incluso trabajando para que esto ocurra, será muy difícil, sobre todo para algunos sectores ante las restricciones de movilidad y salida».

Nada volverá a ser como antes . «Lo mas probable es que la recuperación sea gradual. Van a cambiar nuestros hábitos y patrones de conducta y consumo, y eso va a afectar a la economía. La gente va a tomar muchas más precauciones a partir de ahora. Va a haber sectores que van a tener un auge, como nuevas tecnologías, consumo de ocio, plataformas, venta online... en detrimento de otros como el turismo que irán a la baja. En algún momento se recuperará, la cuestión es cuánto y hasta qué nivel», sentencia Doménech.