Afirman que hallaremos vida fuera de la Tierra en un plazo de 5 a 10 años

«Lo que realmente me sorprendió de los resultados –asegura Caprice Phillips, investigadora de la Universidad Estatal de Ohio y autora principal del trabajo– es que, y siendo realistas, es posible que encontremos signos de vida en otros mundos en los próximos 5 a 10 años».

Desde hace tiempo se sabe que los planetas enanos gaseosos tienen un gran potencia l a la hora de fomentar la vida. Sin embargo, dentro de nuestro Sistema Solar no existe ninguna de estas 'supertierras', o 'minineptunos' (una clase de exoplanetas con radios entre los de la Tierra y Neptuno) que podamos estudiar de cerca, de modo que los científicos tratan por todos los medios de determinar si sus atmósferas contienen, o no, amoniaco y otros gases que puedan delatar la presencia de seres vivos.

La tecnología disponible hasta ahora, sin embargo, no tiene la resolución suficiente para caracterizar las atmósferas de planetas lejanos. Pero eso cambiará a partir de este mismo otoño. Según los cálculos de Phillips, en efecto, cuando el nuevo telescopio espacial James Webb sea lanzado en octubre, será capaz de detectar amoniaco alrededor de seis esperanzadores planetas enanos gaseosos después de sólo unas pocas órbitas.

«Debido a que poseen una gravedad más fuerte que la Tierra –escriben los investigadores–, esta nueva clase de exoplanetas puede retener una atmósfera considerable dominada por hidrógeno. A estos mundos los llamamos planetas enanos gaseosos, en contraste con los planetas gigantes gaseosos. El telescopio espacial James Webb ( JWST ) ofrecerá una visión sin precedentes de la composición atmosférica de los planetas enanos gaseosos potencialmente habitables a través de la espectroscopia de transmisión y emisión, cuyas atmósferas reductoras tienen una química completamente diferente a la de un planeta habitado similar a la Tierra con una atmósfera oxidante».

En su trabajo, Phillips y su equipo modelaron la forma en que los instrumentos del James Webb responderán a las diferentes nubes y condiciones atmosféricas de los planetas estudiados. Después elaboraron una lista con los lugares en los que el telescopio debería buscar vida .

Según escriben los propios investigadores, «investigamos la detectabilidad de NH3 (amoniaco, una posible firma biológica) en las atmósferas de siete planetas enanos gaseosos potencialmente habitables utilizando varios instrumentos JWST (NIRISS, NIRSpec y MIRI). Usamos el paquete de código abierto petitRADTRANS y PandExo para modelar atmósferas planetarias y simular observaciones JWST. Consideramos diferentes escenarios al variar las condiciones de las nubes, los pesos moleculares medios (MMW) y las proporciones de mezcla de NH3, y definimos una métrica para cuantificar la importancia de la detección y proporcionar una lista clasificada para las observaciones de JWST en busca de biofirma en planetas enanos gaseosos».

Los resultados muestran que la búsqueda de biofirmas con el telescopio James Webb es factible con una inversión razonable de tiempo. La resolución de los instrumentos, cien veces más precisos que los del Hubble, podría estar a punto, pues, de hacer realidad uno de los mayores sueños científicos.

En palabras de Phillips, «la humanidad siempre se ha hecho estas preguntas: ¿ Estamos solos ? ¿ Qué es la vida ? ¿Será la vida en otros lugares similar a la que conocemos? Nuestra investigación sugiere que, por primera vez, tenemos el conocimiento científico y las capacidades tecnológicas para comenzar de manera realista a encontrar las respuestas a esas preguntas».