Francisco José López de Paz
Cartuja: el distrito fantasma
A la Cartuja le hace falta luz y vida. Una iluminación que haga compatible el paseo con la noche y vida porque sin ella la isla es un distrito que muere a las ocho de la tarde.
Colaborador
Colaborador de Opinión en Pasión en Sevilla
Francisco José López de Paz
A la Cartuja le hace falta luz y vida. Una iluminación que haga compatible el paseo con la noche y vida porque sin ella la isla es un distrito que muere a las ocho de la tarde.
Francisco José López de Paz
No quería hacerse la prueba en la sanidad privada por una cuestión ideológica
Francisco José López de Paz
«Estoy buscando afectadas » «Pues yo misma. Soy una teletrabajadora liberada del sindicato. Estoy en admisión de urgencias pero ahora teletrabajo» «¿Pero usted es sanitaria?» «Según se mire«
Francisco José López de Paz
Un ministro de Sumar acudiendo a un acto lleno de capillitas, un presidente socialista de la Diputación de Sevilla deshaciéndose en elogios con un arzobispo de la Iglesia Católica. Si no lo veo no lo creo.
Francisco José López de Paz
El día del diluvio el Alcalde se pone al frente del operativo. La Junta afirma que todos los consejeros están en alerta. Cualquiera se iba ese día a comer a una venta o a un ventorro.
Francisco José López de Paz
Los bulos de su presidenta sí que son un cáncer social. Un cáncer que divide, malmete y acaba convirtiéndose en una metástasis de odio todo por una cuestión de estrategia electoral. Y ahí ha entrado ya Amama.
Francisco José López de Paz
La gente de las Tres Mil merece la atención de las instituciones para reconvertir aquello en lo que fue cuando se creó, una zona en la que la gente sin muchos recursos pudiera vivir estupendamente.
Francisco José López de Paz
Dicen que el comercio electrónico nos hace vivir mejor porque tenemos el mundo entero al alcance de un botón. Pero también es cierto que con él vivimos más solos.
Francisco José López de Paz
El presidente de la Fundación Machado Antonio Zoido defiende el traslado de los restos de los dos hermanos al panteón de sevillanos ilustres. La Francia a la que llegó Antonio fue en aquellos tiempos un país hostil con los exiliados
Misión en el polígono sur
La primera parroquia que visitará la Virgen es la de San Pío X. En una plaza aledaña viven a diario decenas de personas sin hogar. Algunos han sabido que viene la Esperanza desde que la hermandad cada fin de semana les ofrece el desayuno
Francisco José López de Paz
Hay contenedores de Sevilla Este de los que extrae basura que se esparce por los alrededores dando una sensación de cochambre. Existen sospechas fundadas de que esa tarea no es de los rebuscadores.
Francisco José López de Paz
Habrá quien piense que la Avenida no es de nadie y le dé igual que la calle principal de Sevilla esté como está. Pero es como el salón de casa casa. Si está sucio, nos dirán y con razón que somos unos guarros
Francisco José López de Paz
Los sin techo que duermen en la plaza y que la toman como si fuera su hogar, almuerzan, cenan, se lavan y hacen sus necesidades allí mismo sin admitir la ayuda que les presta el Ayuntamiento ofreciéndoles los albergues
Francisco José López de Paz
Leo que en París se bañan en el Sena donde hay arenales con sombrillas en las orillas del río, que en Guadalajara se proyectan lagos artificiales para que la gente se refresque, que en otros puntos de Castilla las playas artificiales existen o están en proyecto. ¿A qué espera Sevilla?
Francisco José López de Paz
El acta de defunción de Evelio ha sido una gran noticia. El árbol llevaba meses podrido. Dicen que quieren ponerle una placa. Que la pongan, claro, ha sido historia de Triana. Pero que no se reconozca ninguna lucha estéril porque eso no fue para nada un movimiento vecinal.
Francisco José López de Paz
Llama la atención el respeto y la profesionalidad con el que la televisión nacional trata los Sanfermines y la guasa o el sarcasmo que gasta con las cosas de Andalucía, como la restauración de la Macarena.
Francisco José López de Paz
Lo que ocurre en la Cartuja ya no es solo coacción y amenaza. Es también tirar por tierra la imagen de Sevilla para el turista que viene a la ciudad a meterse en Isla Mágica