Las cinco mejores calas donde bañarse en la costa de Almería

Los días de viento se debe tener cuidado con las corrientes de resaca porque el Levante puede provocar arrastres hacia adentro. En estas calas fuera del entorno urbano no hay socorristas ni avisos del estado del mar por lo que hay que aplicar sentido común. En general, son lugares únicos e incomparables con aguas cristalinas como si del Caribe se tratara, pero en Almería. Aquí te proponemos cinco mejores calas donde poder bañarte en la costa almeriense.

Tranquila y muy pequeña, mide unos 200 metr os , es para muchos, la cala más bonita de Almería. Si no te importa dar una buena caminata y huir de la masificación es la mejor opción. La cala de Enmedio es una de las más bellas con arena fina, dorada y sin piedras.

Las condiciones para el baño son óptimas, pero hay que tener cuidado con las corrientes. Desde aquí las vistas son fantásticas pudiéndose observar el pueblo de Agua Amarga al otro lado de la bahía y, detrás el cerro Mesa Roldán con su faro y castillo.

Cala Carbón es una cala de unos 100 metros de anchura formada por bolos de piedra que impiden tumbarse y dificultan caminar descalzo. Frecuentada por kakays que hacen la ruta del Vela Blanca hasta Cala Rajá, se trata de la última de las calas a las que se puede llegar en coche desde San José.

Desde ella se divisa el faro que corona el macizo de Cabo de Gata . Al lado de Cala Carbón está Cala Chicré, de apenas 50 metros pero de arena que desaparece con la marea. Una de las mejores calas para disfrutar del buceo por la riqueza de su fauna y flora marina.

Esta cala se encuentra a menos de diez minutos andando desde Las Negras en dirección al Camping La Caleta . Con ambiente tranquilo dispone de una pared natural ideal para el snorkel y se puede acceder en vehículo por una pequeña rambla que lleva hasta el camping.

Las vistas desde la playa son espectaculares pues se ve el pueblo de las Negras, el impresionante Cerro Negro en primer plano y, detrás de él, la Cala San Pedro. En la entrada al agua hay piedras pero pronto desaparecen y el fondo marino cercano a la playa está compuesto de arena.

A pesar de que su acceso es complicado, vale la pena el esfuerzo, aunque solo sea para contemplar los arrecifes que emergen del mar, como el conocido Dedo de Dios. Una de las playas del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar más alejada de un núcleo urbano , que se encuentra a mitad de camino entre el Faro de Cabo de Gata y la población de San José.

La cala está situada entre acantilados que la protegen totalmente del molesto viento de Levante que tan a menudo azota esta zona del litoral. La arena es muy fina y agradable, la entrada al agua es suave y progresiva, a ambos lados la playa termina por formaciones rocosas constituidas por dunas fósiles, oolitos.

La ubicación de esta pequeña cala, de poco más de 120 metros de longitud, una zona de especial protección terrestre, muy destacable es la vegetación de alrededor de esta cala , donde podemos observar la flora típica de Cabo de Gata. El acceso a esta playa no es fácil, por lo que no se aconseja ir excesivamente cargado, aunque sí llevar comida y bebida.

A tres kilómetros de Las Negras se ubica la cala del Plomo con más de 200 metros de longitud, piedras, arena fina y una limpieza excepcional. La entrada es progresiva y a ambos lados hay paredes formadas por dunas fósiles.

En verano la afluencia es media y está frecuentada tanto por bañistas naturistas como por textiles. Desde esta cala, se puede coger el camino señalizado que une las poblaciones de Aguamarga y Las Negras . Siguiendo el sendero en dirección al Levante, nos encontraremos con la Cala de Enmedio, y en dirección opuesta, hacia Las Negras, a través de las casas y buscando la subida, se llega a la Cala de San Pedro.