Así deberías llevar la corbata lo que queda de 2021

En el 2021, la corbata es un accesorio masculino más. Como lo son el pañuelo , los sombreros, las riñoneras o los bolsos, por citar ejemplos muy distintos entre sí. En los armarios clásicos donde la sastrería tiene un peso importante , la corbata sigue muy presente, pero es una realidad evidente que ya no se lleva como antaño. Basta con darse una vuelta por las colecciones y redes sociales de sastrerías icónicas de Saville Row como Gieves & Hawkes o Richard James, esta última más moderna a priori, para ver que la corbata ya no es omnipresente.

Los dos piezas sin corbata están a la orden del día aunque se mantenga la camisa, por no hablar ya de los trajes con camiseta, polo o jersey de punto. En todo caso, la corbata parece que mantiene su espacio intacto con los tres piezas , donde todavía se utiliza de forma mayoritaria y además con un papel protagonista, generalmente de pala ancha.

Sin embargo, pese a perder protagonismo en su espacio natural, el de la sastrería, la corbata ha sido capaz de aprovechar la oportunidad que la ruptura de formalismos y esquemas prefijados que la moda contemporánea ha experimentado gracias a la innovación de nuevos creadores en los últimos años para encontrar algunos resquicios por los que sacar la cabeza poco explorados para este accesorio históricamente.

Uno de estos creadores es Virgil Abloh, director creativo de Louis Vuitton y director ejecutivo de Off-White, la firma que junto a Balenciaga mejor representa la conquista de la industria textil del lujo por parte de la moda deportiva. Abloh, este mismo verano, dejó un look con corbata para el recuerdo que bien explica gráficamente los nuevos usos de la corbata en el 2021: ya no solo se puede llevar en contextos muy formales, sino que también tiene registros más relajados, reivindicativos y, por supuesto, vanguardistas . Jamás hubieras podido imaginar hace unos años en un look compuesto por una corbata con la inscripción ‘A formality’ (“una formalidad”, en castellano), un traje negro ancho, deportivas y manicura roja, pero Virgil Abloh rompe moldes con cada idea que ejecuta.

La libertad creativa es, por lo tanto, la mejor manera de llevar la corbata en pleno 2021 . Es perfectamente válido, por supuesto, elegir un diseño de seda de la mejor calidad para tu próxima boda y acertarás de pleno, pero también puedes llevarla en otras ocasiones menos especiales.

Para ello, puedes jugar con los materiales -de punto en invierno y algodón en verano- y con los estampados coloridos y divertidos, siendo las rayas oblicuas uno de los más que se ve en las nuevas colecciones de las firmas especializadas en sastrería.

No dudes en mezclar estampados en corbata y camisa cuando unas ambas piezas. Es más, puedes apostar por el mismo print, las rayas o los cuadros por ejemplo, pero con distinto color, tamaño o dirección, sin preocuparte de que todo cuadre al detalle. Esos tiempos donde todo tenía que ir combinado y medido hasta el punto de que no se podían mezclar estampados ya han quedado atrás.

Dos pistas más para llevar con acierto la corbata en pleno 2021 son que no siempre tienes que ponértela de la mano de una americana y que no pierdas de vista el corbatín. Este último, después de ser tendencia hace unos años, a mitad de la década pasada, aparece en algunas colecciones de nuevo y lo hace como alternativa a la corbata tradicional en los trajes de dos piezas. Les aporta un punto informal similar al de no llevar corbata, que es lo que más se ha estilado en los últimos tiempos, pero sin tener que renunciar, por ejemplo, a lo mucho que luce un nudo bien hecho y un dibujo bonito y elegante a una camisa lisa.

En lo que respecta a la blazer, ya va siendo hora de que te atrevas a introducir la corbata junto a otras chaquetas . No lo decimos nosotros: te invitan a ello iconos de la moda como David Gandy y firmas que son referentes en el universo de las sastrería como Brooks Brothers.

En cualquier caso, nuestra recomendación final es que si vas a ponerte una corbata este año ten en cuenta que lo que pide es que la reivindiques todo lo que puedas. Salvo excepciones, olvídate de lucirla en un segundo plano y dale el protagonismo que merece porque, además, las firmas te invitan a ello con sus diseños. Ya sabes qué fórmulas tienes a tu alcance para ello así que ya solo depende de ti ejecutar la que más coincida con tu estilo personal