Un expreso de aceite de oliva por favor

Este lanzamiento lo avanza la revista norteamericana sobre innovación gastronómica The Spoon (La Cuchara), que ofrece más detalles. Así, el precio de Olive X-Press rondaría en el mercado los 299 dólares (unos 254 euros) y cada bolsa de aceitunas de 3 kilos costaría entre 6 y 8,5 euros. El coste de producir aceite de oliva sobre tu encimera resulta elevado, teniendo en cuenta que de cada bolsa se obtiene solo medio litro. Eso sí, de un zumo de aceituna de toma pan y moja.

Exit Valley ha logrado captar ya, a través de una operación de crowdfunding (financiación cooperativa) alrededor de 328.000 dólares de inversores interesados en la prensa de aceite en frío en la cocina, y ha destinado al diseño de esta tecnología 1,5 millones de dólares (1,27 millones de euros), precisa el autor de la publicación, Chris Albrecht.

La idea de los impulsores es sacar al mercado, en unos meses, un segundo prototipo de máquina a mayor escala para supermercados , que permitiría a los clientes llevarse el aceite recién hecho en el carrito de la compra, como, por ejemplo, uno puede hacerse un zumo de naranja fresco en el Mercadona.

¿Y por qué ese afán de prensar tú mismo el aceite de oliva , con la calidad que ofrecen las marcas de virgen extra y el cuidado cada vez mayor con el envasado para que garantizar una óptima conservación?

La respuesta a esta pregunta parece estar, por un lado, en l a moda de lo fresco , y, por otro, en las dudas que los consumidores judíos tienen sobre si la etiqueta «virgen extra» se corresponde verdaderamente con el producto comercializado. De dónde viene la aceituna, cómo se presionó, cuánto tiempo permaneció la botella en el estante del supermercado o cómo se conserva sin alteraciones en casa son las cuestiones que estos consumidores exigentes se plantean sobre lo que en Andalucía llamamos el «oro líquido».

El artilugio israelí tiene tres patentes y, entre ellas, ha presentado un tratamiento orgánico —Olive X-Tend— que alargaría la vida útil de las aceitunas, ya que consigue sellarlas al vacío para que duren más de un año. No se especifica más.

¿Tendrá recorrido comercial esta prensadora? La respuesta nos la sugiere el propio autor del artículo: «Puede ser mi perezoso sesgo estadounidense, pero, aunque estoy seguro de que el aceite de oliva fresco sabe mucho mejor, mi corazonada es que es preferible coger una botella de la tienda ».