La familia de Aníbal González defiende el cierre de la Plaza de España: «Hay que protegerla»
«Esa medida está más que justificada. No entiendo la reacción contraria cuando es algo que ocurre con otros grandes monumentos», dice el nieto del arquitecto
El Ayuntamiento de Sevilla cerrará la Plaza de España y cobrará la entrada
La Plaza de España de Sevilla, ¿Patrimonio de la Humanidad?
La Plaza de España en una imagen tomada este mismo lunes
La Plaza de España tiene un sentimiento especial y único para una familia en concreto, la del arquitecto que la ideó. Aníbal González ha sido mencionado en reiteradas ocasiones desde que ABC diera a conocer este pasado fin de semana la propuesta del actual Gobierno municipal de cerrar el emblemático monumento ... y cobrar una entrada a los turistas. Pero ¿qué piensan realmente los herederos del padre de la Plaza de España? Su nieto Aníbal lo tiene claro: «Llevo muchos años reclamando el cierre para protegerla. La plaza necesita protección y vigilancia. Es una medida más que justificada«, señala en declaraciones a este periódico.
Este doctor en Medicina hace repaso de inmediato a los actos vandálicos de los que ha sido testigo cuando ha paseado por las inmediaciones de la plaza. Unos hechos que les duele «especialmente» por su cercanía familiar con el creador. «He visto cómo lanzaban botellas contra la balaustrada, cómo se han llevado trozos de la cerámica o cómo un borracho, aficionado inglés de un equipo de fútbol, se tiraba al estanque. Sobran los motivos para adoptar medidas que conduzcan a la protección de este monumento. No hay más remedio«.
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Aníbal González, que ejerce de portavoz de la familia del genial arquitecto, dice no entender la reacción contraria al proyecto municipal y sale en defensa del alcalde, José Luis Sanz: «Ha sido una propuesta valiente, que está cargada de mucho sentido común. Precisamente porque es un espacio público, de todos los sevillanos, tenemos el deber de conservarlo y no dejar que se vaya deteriorando poco a poco. Estamos hablando de que al año pasan más de un millón de personas por allí. Eso ya de por si tiene un impacto tremendo en el monumento que ha perdido gran parte de sus materiales primitivos«.
Sobre el cobro de una entrada, tiene claro cuáles deben ser los límites: «El acceso tiene que ser gratis para los sevillanos, los vecinos de la provincia, los residentes en la ciudad. Pero no pasa nada por cobrar al resto y dedicar ese dinero para la conservación y para crear puestos de trabajo. Eso mismo ocurre en otras capitales del mundo y hay colas para hacerse con una entrada».
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