El hábito que te hace sentir hasta diez años más viejo

Los dos estudios, llevados a cabo por investigadores del Instituto Karolinska de Suecia, se han publicado en la revista 'Proceedings of the Royal Society B'. En ellos, examinaron el impacto del sueño insuficiente y la somnolencia en la experiencia subjetiva de la edad.

El estudio 1, una investigación transversal de 429 participantes de entre 18 y 70, mostró que por cada día adicional de sueño insuficiente en los últimos 30 días, la edad subjetiva aumentó en 0,23 años. El estudio 2, experimental cruzado de restricción del sueño, cuyos participantes tenían un rango de edad de 18 a 46 años, demostró que dos noches de restricción del sueño (4 horas en la cama cada noche) hacían que las personas se sintieran 4,44 años mayor en comparación con un sueño completo (9 horas en cama por noche).

Además, pasar de sentirse extremadamente alerta (puntuación de 1 en la escala de somnolencia de Karolinska) a sentirse extremadamente somnoliento (puntuación de 9 en la KSS) se asoció con sentirse 10 años mayor en ambos estudios.

Estos hallazgos, señalan los autores del estudio, brindan «un respaldo convincente de que el sueño insuficiente y la somnolencia ejercen una influencia sustancial en la edad que sentimos, y que proteger el sueño es probablemente un factor clave para sentirnos jóvenes«.

Muchas personas se sienten más jóvenes que su edad cronológica. A medida que nos acercamos a los treinta y más, la discrepancia entre nuestra edad y la edad que sentimos se vuelve más pronunciada.

«La edad subjetiva, a menudo referida a la edad que sentimos, es un concepto que va más allá de la mera percepción. Resulta que sentirse más joven que nuestra edad real se asocia con vivir más tiempo, mejor salud física y mental y rasgos psicológicos más positivos (por ejemplo, optimismo, esperanza, resiliencia), lo que genera sugerencias para incluir la edad subjetiva como marcador biofísico del envejecimiento como parte de los exámenes de salud«, señalan los autores del estudio.

Cada vez está más claro que el descanso es fundamental para la salud. En esta misma línea, la Asociación Estadounidense del Corazón actualizó recientemente sus recomendaciones para mantener una buena salud cardiovascular e incluyó como fundamental las horas de sueño. Lo ideal es dormir de 7 a 9 horas diarias en el caso de los adultos . Para niños, los rangos recomendables son de 10 a 16 horas para menores de 5 años; 9 a 12 horas para los que tienen entre 6 y 12 años; y de 8 a 10 horas para edades de 13 a 18 años.