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puntadas sin hilo

Los ERE no existieron

Lo peor de la artimaña de Pedro Sánchez es que se ejecuta ante el clamoroso silencio de Espadas

Manuel Contreras

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A poco de llegar a la Moncloa, José Luis Rodríguez Zapatero anunció que iba a terminar con las pateras. Vivíamos entonces en plena explosión de la inmigración ilegal y el Estrecho era una enorme tumba que albergaba una cifra desconocida de cadáveres y sueños rotos. ... El presidente, inspirado por el 'Imagine' de Lennon y con la certeza de sentirse ungido por los astros para cambiar el mundo, promovió una movilización internacional para terminar con el drama de la inmigración ilegal en el planeta. Frustrado por su nulo éxito, optó por otra solución menos benemérita: de la noche a la mañana, los precarios botes en los que los pobres diablos desesperados se echaban al mar pasaron a denominarse cayucos. El inefable ZP había cumplido su promesa, porque acabó con las pateras de un plumazo.

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