EN CLAVE DE TRON
Sobre el futuro de la UE
Trump es la oportunidad de Europa para espabilar a la fuerza. Porque, a pesar de todo, la UE somos la mejor región del mundo para tantas cosas
No...Putin no ha ganado la guerra
Barbate, un año después
Se lo escuché hace poco a Cristina Garmendia. Como se lo leí a Mario Draghi y lo dijo Enrico Letta en el último encuentro ABC Gran Angular: «Estamos ante una gran oportunidad. A la fuerza ahorcan. Es la hora de la verdad. La Unión ... Europea ante la ocasión de espabilar. Porque si no...» Quién sabe. Quizás las estupideces, las excentricidades y exageraciones (muchas de éstas sobreactuadas a propósito) de Donald Trump nos la dejen botando y a media altura dentro del área. Solo hacen falta líderes capaces de atisbar el futuro a medio y largo plazo. Líderes que piensen en la Defensa, la energía, el mercado común y los valores en los que se fundamentó la vieja Europa.
Problema, hoy no tenemos ningún Adenauer, Monet, Schuman o De Gasperi. Hoy tenemos una Alemania sin Angela Merkel, un Macron que hace lo que puede para subsistir, una Giorgia Meloni que, eso sí, cada día apunta mejores maneras y nosotros... «para no echar gota». ¡Ah! y sin Reino Unido.
Con todo, la Unión Europea es la mejor región del mundo para vivir y para morir. Como en su día le escuché a alguien: «Europa es la mejor región del mundo para ser mujer, para jubilarse o para que te duelan las muelas». A lo que yo añado que es la mejor región del mundo para cualquier religión, ser inmigrante o para caer enfermo.
Piénselo. ¿Alguien emigraría de aquí hacia allá? ¿Quién de nosotros emigraría con la familia a cuestas a Rusia, China, Pakistán, Arabia Saudí, República Democrática del Congo, Venezuela, Cuba...?
Capítulo al margen merece Estados Unidos en este nuevo orden mundial que vivimos en directo. Seamos sinceros: ni los más trumpistas pudieron prever que este segundo mandato sería así. Desde una 'Riviera' en Gaza, a los escupitajos a Zelenski, pasando por Guantánamo, los Brics, Groenlandia, el canal de Panamá y, todo ello, de la mano de un demócrata de toda la vida como Vladímir Putin. Por favor, un poquito de por favor...
Y nos queda el miedo en la frontera del Este. Los recuerdos de Lituania, Letonia, Estonia, Polonia, Finlandia... las plazas de Kaliningrado, Transnistria, Crimea. Como las paradojas que confirman que los extremos se tocan. Desde la ultraderecha europea apoyando a Putin, hasta la ultraizquierda coincidiendo con Trump.
PD: Sobre el inexorable incremento de los gastos de Defensa: ¿con esta banda como socios pensamos ir a algún sitio? Podemos y Sumar son proPutin y antiOTAN; Puigdemont fraguó el golpe del 'procés' con espías rusos; ERC ve a las Fuerzas Armadas como un ejército de ocupación; al PNV le da lo mismo con tal de seguir a lo suyo. Y en cuanto a Bildu/Batasuna... revisemos la lista de militares asesinados por ETA. Y de cara al futuro queda Vox. ¿En serio su modelo del mundo, de Europa y de España es el que Trump y Putin representan de la mano en Arabia Saudí?
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