Sala de máquinas
Menores trans
En España, un menor de 16 años no puede comprar lotería de Navidad, ni firmar contratos o documentos legales sin la autorización de los padres, ni hacer apuestas, tiene el acceso vedado a muchos locales, le está prohibido adquirir una cerveza o un paquete de ... tabaco, carece de derecho al voto, o de libertad para faltar a clase sin el justificante familiar, o hacerse un tatuaje, en fin, muchos contenidos y servicios le están plenamente prohibidos. Porque tiene 16 años y es menor de edad y le falta la madurez o responsabilidad acreditada para ciertos actos y decisiones. Pero a partir de ahora, pese a todas las limitaciones anteriores, lo que sí podrá es emprender un cambio de sexo/género legal, farmacológico o quirúrgico pese a la oposición de los padres, incluso sin el aval de un informe médico. Porque tanto sobran unos como otros en esta ‘ley Trans’ con la que Irene Montero le ha ganado la batalla ideológica a Carmen Calvo. A un precio salvaje, que pagarán otros.