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La alberca

Los demoscópatas

El comité de expertos de Sánchez es como sus seguidores de Twitter, una gran mentira

Alberto García Reyes

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Había un crítico de teatro en Londres a comienzos del siglo XX que no tenía valor para meterse con los actores y dramaturgos. Digamos que pasteleaba con ellos, que es uno de los vicios más ruines de un periodista. Esta es la peor profesión del ... mundo para hacer amigos porque su primer fundamento es hacer emerger la verdad. El crítico tiene que alabar a sus enemigos cuando lo merezcan y maldecir a sus amigos cuando no den la talla. En definitiva, tiene que ser honesto con sus propias opiniones, lo que implica, por definición, meterse en problemas. Pero aquel del que hablo era tan lisonjero que decidió recurrir a un ardid para darle caña a los actores. Cuando a él no le gustaba su interpretación, escribía: «Un señor con bigote exclamó desde su butaca: ¡mal, muy mal!». De esta forma él podía defenderse ante el afectado alegando que lo único que había hecho era dar cuenta de lo que opinaba el público.

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