Truss y Sunak protagonizan un bodrio televisivo

El programa supuso una plataforma para que ambos volvieran a exponer públicamente sus ideas y las políticas que están dispuestos a asumir en caso de hacerse con el poder, y sobre todo, un nuevo escenario destinado a ganarse a los miembros de la formación que decidirán su futuro y, por consiguiente, el de la población británica, pese a representar solo el 0,3% del electorado de todo el país. Pero nada más.

Cabe recordar que el debate del pasado 26 de julio, el segundo entre ambos que se emitía por televisión, fue suspendido después de que la presentadora Kate McCann se desmayara durante la transmisión en directo, por lo que este jueves se esperaba que ambos llegaran listos para ponerse al día con la discusión que dejaron a medias, pero no tuvieron ningún momento para discutir entre sí.

El esfuerzo de Sunak por cerrar la brecha de intención de voto de los miembros del partido conservador con Truss que, según las encuestas es cada vez mayor, fue evidente en sus intervenciones, pero no hubo ocasión para que las tensiones entre ambos afloraran como en otros encuentros. El veredicto de la audiencia, al final de la emisión, contradijo a las encuestas: la mayoría, tras la pregunta de la presentadora de por quién votaría tras haber escuchado hora y media de exposición y entrevistas sobre los impuestos, la inflación, el costo de la vida y el NHS, el sistema nacional de salud, entre otros, dijo que por Sunak.