La piscina de Madrid que solo cuesta 2 euros y tiene unas bonitas vistas a la ciudad: dónde está y cómo llegar

En la oferta hay piscinas que son más populares que otras, más caras o céntricas. Una opción asequible por solo 2 euros está en el Centro deportivo municipal Vicente del Bosque, en el barrio de La Paz, en el distrito de Fuecarral-El Pardo.

El horario de taquilla, según la web madrid.es:

De lunes a viernes, de 8,30 a 20,30 horas.

Sábados y domingos, de 8,30 a 14,30 horas.

Festivos, cerrada.

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Metro: Begoña, Barrio del Pilar.

Bus: 134, 137.

Renfe: Chamartín.

Bicicleta: el centro dispone de aparca bicicletas exterior con capacidad para 5 bicicletas.

Servicio Bicimad, para consultar la estación más cercana, acceda al mapa de geolocalización de las estaciones.

Desde la web del Ayuntamiento detallan que a las personas que adquieran el turno completo se les facilitará en el control de acceso una pulsera identificativa. Será obligatorio portar la pulsera a lo largo de toda la jornada de forma visible para el control del personal de la instalación, siendo intransferible y válida exclusivamente para el día de su adquisición.

A través de Deportes/web o descargándote la app «Madrid Móvil» y seleccionado «Entradas de uso libre >piscina de verano». Se podrá adquirir la entrada con una antelación máxima de 49 horas a la del inicio del turno correspondiente.

El acceso al recinto se realizará a través de la lectura del código QR recibido con la adquisición de la entrada. Y se reservará un 20% de entradas por turno y día que se pondrán a la venta el mismo día de la prestación del servicio y con una antelación de 30 minutos al inicio del turno, en la taquilla del centro deportivo y exclusivamente para las personas mayores de 65 años, poseedores de la tarjeta madridmayor.es y titulares del carné de deporte especial. De manera excepcional se puede utilizar este cupo para otras personas afectadas por la brecha tecnológica.

Gracias a este tipo de oferta, tal vez, el visitante encuentre un respiro a un verano asfixiante que no da tregua y parece poner a prueba tanto los termómetros como nuestra resistencia.