La investigación apunta a que el ataque contra Kirchner fue planeado con antelación

En la soleada tarde porteña del martes, se volvió a tomar testimonio al ciudadano brasileño Fernando Sabag Montiel –quien el jueves pasado apuntó con un revólver al rostro de la vicepresidenta-, pero también a su pareja, Brenda Uliarte, quien inútilmente había intentado despegarse públicamente de su vínculo con el detenido luego de ocurrido el hecho. La justicia sospechaba de ella desde un primer momento.

Otra de las conclusiones a las que llegaron los investigadores en las últimas horas es que la pareja de acusados no habría actuado de manera independiente, sino que habría más cómplices. En las imágenes rescatadas del teléfono del detenido –y publicadas por el medio argentino Infobae- se ve a Montiel y a Uliarte posando con el arma que luego apareció en el lugar de los hechos el pasado 1 de septiembre. También hay fotografías en las que se ven claramente los proyectiles.

Además de las fotografías que aparecieron en el teléfono móvil, otra de las razones por las cuales la justicia argentina analiza la premeditación del ataque es que existen varias imágenes registradas por cámaras de seguridad que muestran a la pareja del hombre en la zona del domicilio de Cristina Kirchner días antes de producirse el ataque a la funcionaria.

La investigación sobre el ataque a la expresidenta argentina, que se produjo cuando ella regresaba a su apartamento en el barrio porteño de Recoleta, está siendo llevada a cabo por la jueza María Eugenia Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo. Además de los testimonios de diferentes asistentes que presenciaron el hecho, también se ha tenido en cuenta la información recabada cámaras de seguridad ubicadas la zona y los datos de los teléfonos móviles de los dos detenidos.

En declaraciones a la televisión local realizadas luego de producirse el ataque a la funcionaria, Uliarte había afirmado que ella no tenía nada que ver con el hecho. Además, declaró que no veía a su pareja desde hacía 48 horas. Las fotografías encontradas en el teléfono de su novio, y publicadas luego por la prensa local, demuestran que no es así.

En los días previos al intento fallido de asesinato a la vicepresidenta, un grupo de personas se daba cita en la puerta del domicilio de Cristina Kirchner en señal de apoyo a la funcionaria, tras darse a conocer el pedido de la fiscalía del caso -en el que es acusada de corrupción- de 12 años de prisión para la exmandataria. En una de estas jornadas, la pareja del atacante habría circulado por la zona.

Además de la pareja de detenidos, ya han declarado también cuatro amigos de ambos que han aportado distintos elementos a la investigación en curso. Este jueves por la noche se cumplirá una semana de que el ciudadano de origen brasileño Sabag Montiel, de 35 años y que reside en Argentina desde 1993, disparó un arma –concretamente, un revólver Bersa calibre 32- en el rostro de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Si bien el arma contaba con cinco balas, ninguna de ellas salió al momento de producirse el disparo.