EE.UU. desafía a China con la visita de la presidenta de Taiwán a California
El ministro de Exteriores chino anuncia una «respuesta decidida» a la reunión entre Tsai y el presidente de la Cámara de Representantes
China advierte a EE.UU. de que «si no pisa el freno, habrá conflicto»
Corresponsal en Nueva York
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Iniciar sesiónChina anunció este jueves que tomaría una «respuesta decidida» para «defender la soberanía nacional e integridad territorial» de su país, pocas horas después de que la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, fuera recibida en California por Kevin McCarthy, el presidente de ... la Cámara de Representantes de EE.UU.
Durante semanas, el Gobierno de Xi Jinping ha alertado a EE.UU. para que no se produjera el encuentro, que considera una provocación y una interferencia en sus asuntos internos. China considera a Taiwán, una isla con gobierno democrático y que se rige con independencia del régimen comunista continental desde hace más de siete décadas, como parte de su soberanía; EE.UU. no reconoce oficialmente a Taiwán como país desde finales de la década de 1970, cuando se adscribió a la política de 'una sola China', pero mantiene fuertes relaciones comerciales y proporciona apoyo militar a su Gobierno.
No es una visita oficial
«Nuestros lazos son más fuertes que en cualquier otro momento de mi vida», dijo McCarthy en una comparecencia conjunta con Tsai, celebrada en la Biblioteca Ronald Reagan de Simi Valley, en California, el estado al que representa el diputado republicano. El viaje de la presidenta taiwanesa se vendió no como una visita oficial, sino como una parada en su viaje de regreso a Taiwán tras su paso por Guatemala y Belice.
Tsai agradeció la presencia de McCarthy y otros legisladores -tanto republicanos como demócratas- en la reunión: «Nos da garantía al pueblo de Taiwán de que no estamos aislados y de que no estamos solos».
La reunión se produce en un contexto de creciente rivalidad entre EE.UU. y China, en medio de un mayor acercamiento del Gobierno de Xi a la Rusia de Vladimir Putin y tras episodios de tensión recientes como el derribo de un globo espía chino en territorio estadounidense.
Encuentro en verano
El antecedente más cercano al encuentro entre McCarthy y Tsai fue el pasado verano, cuando la antecesora del presidente de la Cámara Baja, Nancy Pelosi, visitó Taiwán, en el viaje oficial estadounidense de mayor importancia a la isla en décadas.
Entonces, China reaccionó con una demostración de fuerza y agresividad: organizó las mayores maniobras militares de su historia en las inmediaciones de Taiwán.
Ayer todavía no se había producido una respuesta similar, pero sí algunos movimientos. China había desplegado tres navíos de guerra en el estrecho de Taiwán y había intensificado el uso de guardacostas en esas aguas.
La Casa Blanca, que no ha participado en la reunión entre Tsai y McCarthy, advirtió a China que no puede utilizar la visita como «pretexto» para presionar y agredir a Taiwán.
La visita en California no ha sido el único contacto de la semana. Ayer, una delegación de diputados estadounidenses de ambos partidos llegó a Taiwán, comandados por el republicano Michael McCaul, que preside el Comité de Exteriores de la Cámara Baja.
«Estar aquí manda una señal al Partido Comunista de China de que EE.UU. apoya a Taiwán y que vamos a reforzar a Taiwán, y queremos que se lo piensen dos veces antes de invadirla», aseguró.
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