Abbottabad, el retiro de Bin Laden
Abbottabad, el retiro de Bin Laden
El último escondite del terrorista más buscado es una ciudad pakistaní populosa y turística situada en plena ruta de la seda
L. CANO
El terrorista Osama Bin Laden no estaba escondido en desiertos muy lejanos ni montañas recónditas. El líder de Al Qaida pasó los tres últimos años de su vida en la ciudad pakistaní de Abbottabad , un habitual lugar de retiro para los soldados ... jubilados del Ejército a las órdenes de Islamabad. Precisamente Abbottabad, la ciudad con la principal academia militar de Pakistán.
La localidad escogida por el terrorista más buscado no es una aldea escondida, al contrario. Abbotabad es una ciudad populosa de cerca de 120.000 de habitantes situada en la región de Hazara. La ciudad, auna altitud de 1.250 metros sobre el nivel del mar, está situada a 50 kilómetros al norte de la capital de Pakistán, Islamabad, y a 200 kilómetros al este de la frontera con Afganistán.
Abbottabad, situada en plena ruta de la seda, es además uno de los principales enclaves turísticos de la ciudad. [ Mira aquí un vídeo con imágenes de la ciudad ]. Y las colinas que la rodean albergan casas de veraneo. La ciudad, de hecho, recibe el nombre de un enamorado de su paisaje, el general británico James Abbott, su fundador en 1853, después de la anexión del Punjab a la corona. Abbott, a pesar de su limitada capacidad literaria , escribió un poema sobre la belleza del enclave norteño de la actual Pakistán.
Una casa indiscreta
Un indiscreta ciudad y una vivienda aún más indiscreta. El escondite de Bin Laden estaba lejos de ser una cueva. Al contrario, llamaba tanto la atención que EE.UU. tiene sospechas sobre el papel jugado por los servicios de inteligencia de Pakistán, cuestionados por su doble juego de colaboración con Occidente y cierta tolerancia hacia los talibanes.
La casa-escondite asaltada tiene rasgos de fortaleza: muros de entre 3,6 y 5,5 metros de altura, coronados con alambre de espino, y los muros internos para dividir el recinto. Cuenta con pocas ventanas hacia al exterior y la terraza tiene un muro de privacidad de más de dos metros. Todo valorado en un millón de dólares .
Las costumbres en el hogar de acogida del terrorista más buscado tampoco eran comunes en la zona. Los Bin Laden, por ejemplo, quemaban su basura dentro del patio para evitar dar pistas. Los vecinos, sin embargo, aseguraron a Reuters que nunca tuvieron sospechas.
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