Hazte premium Hazte premium

Conmoción en Italia por el asesinato de un carabinero, acuchillado por un joven turista estadounidense

Al inicio se sospechó de inmigrantes magrebíes, después fueron detenidos dos jóvenes norteamericanos de 19 y 20 años

Flores en memoria del agente fallecido EFE
Ángel Gómez Fuentes

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Italia se ha conmocionado por el asesinato de un carabinero, al que un joven y rico turista norteamericano acuchilló en la madrugada del jueves al viernes en el centro de Roma. Un crimen horrendo por un gramo de cocaína. Durante la jornada del viernes los medios informativos señalaron como presuntos homicidas a un par de jóvenes norteafricanos. Después mediante los videos registrados por las cámaras de vigilancia de un banco y otros locales se llegó a identificar a los dos estadounidenses, que tras el asesinato se fueron a dormir a su lujoso hotel de cuatro estrellas, situado a pocos metros del lugar del crimen. En su habituación se encontró el cuchillo de notables dimensiones, escondido en un doble techo, junto a las ropas que llevaban en la noche del homicidio. Los presuntos asesinos del carabinero Mario Cerciello Rega , de 35 años –casado hace poco más de un mes, acababa de volver de su viaje de novios-, son Christian Gabriel Natale Hjorth y Elder Finnegan Lee , de 19 y 20 años, respectivamente, nacidos en San Francisco. En la noche del viernes se confesó autor del crimen Elder Finnegan, presunto responsable de haber dado ocho cuchilladas al carabinero, una de ellas mortal al corazón. El joven usaba psicofármacos. En su habitación se le encontró Xanax, un potente ansiolítico. Ambos están acusados de homicidio, robo e intento de extorsión.

Brutal agresión

Según la reconstrucción de la policía, los jóvenes acudieron a un narcotraficante en el barrio de Trastevere para comprar cocaína, pero en lugar de esa droga les dio pastillas de aspirina triturada. Los jóvenes volvieron a encontrarse con el camello y le robaron la mochila. Después citaron al traficante en la madrugada, cerca de su hotel, al lado de la céntrica Plaza Cavour, para devolvérsela, a cambio de 100 euros y un gramo de coca. El narcotraficante llamó al 112, teléfono de emergencias, y se puso de acuerdo con dos carabineros para tender una trampa a los jóvenes estadounidenses. Estos salieron de su hotel en el que se alojaban a la hora convenida y en lugar del narcotraficante del que pretendían 100 euros y un gramo de buena cocaína se encontraron a los dos militares, en servicio y vestidos de paisano, que les pedían la documentación. En la orden de detención se precisa que «sin que ninguno de los dos hubiera extraído su arma, Elder, bloqueado por Cerciello Rega, extrajo un cuchillo asestando varias puñaladas a la víctima en zonas vitales. Después de la agresión, los jóvenes escapaban sin preocuparse de las condiciones de Cerciello Rega, sin vida».

Puntos oscuros

En la dinámica de la brutal agresión en el corazón de Roma permanecen puntos oscuros que no han sido aclarados por las comunicaciones oficiales. Por ejemplo, parece extraño, casi imposible de creer, que un narcotraficante pida ayuda a los carabineros. Otro gran interrogante se hace todo el mundo: ¿Los dos militares iban armados? En el supuesto de que fueran armados, ¿por qué no utilizaron el arma de servicio para defenderse de los agresores?

Otro punto no aclarado es el presunto papel de cuatro norteafricanos –tres marroquíes y un argelino-, inicialmente implicados en las investigaciones.

Ola de indignación y rabia

El homicidio creó gran conmoción en Italia y levantó en las redes sociales una ola de indignación y odio hacia los inmigrantes. Varias circunstancias han contribuido a este enorme impacto: La violencia inaudita contra el militar, las condiciones precarias de seguridad en Roma –el crimen se cometió a dos pasos del Tribunal Supremo y en un barrio aparentemente muy seguro-, y además se ha puesto de relieve que hay un supermercado de la droga, repartido en al menos dos docenas de plazas, que envenena la capital italiana.

El ministro del interior, Matteo Salvini , ha evocado la pena de muerte: «Recuerdo a los buenistas que en Estados Unidos quien asesina corre el riesgo de la pena de muerte. No digo que se llegue a tanto, pero sí cárcel para toda la vida».

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación