Los yihadistas decapitan el turismo en el Magreb

«En tres días vimos cómo eran canceladas el 30 por ciento de las reservas», ha indicado el ministro Amel Karboul. «Es una pena porque octubre suele ser un mer fuerte para los turistas de Francia».

La de Túnez está siendo la transición menos violenta de los países que se han visto sacudidos en los últimos tres años por la Primavera Árabe . El país no está exento de afrentas de grupos terroristas y yihadistas, pero la situación interna está lejos de la que se vive en vecinos como Libia o Egipto. Túnez vivirá el próximo 26 de octubre elecciones parlamentarias y presidenciales el 23 de noviembre.

El país magrebí estaba recuperando algo el nivel de visitas anteriores a las revoluciones, pero a lo largo de 2014 la llegada de franceses, los turistas más numerosos, había descendido un seis por ciento, según el ministro.

De manera paralela, marruecos, el otro gran destino de los viajeros franceses en la región también se ha visto afectado. Según una investigación realizada por el diario «L'Economiste» a principios de mes, los profesionales de turismo marroquí han registrado un 50% de anulación de las reservas francesas en una sola semana, dato preocupante si se tiene en cuenta que el turismo galo representa el 35% del que visita Marruecos, según cifras de julio del Ministerio de Turismo marroquí.

Todo ocurrió poco después de que el guía de montaña francés Hervé Gourdel fuera decapitado al este de Argel el 24 de septiembre por el grupo denominado Soldados del Califato, una escisión de Al Qaida del Magreb Islámico (AQMI) que ga jurado fidelidad al Estado Islámico. Los terroristas, al igual que sus colegas en Siria e Irak han hecho con dos británicos y dos estadounidenses, grabaron de manera macabra el asesinato en vídeo y lo colgaron en internet.

Esta «oleada de anulaciones» se produjo tras las advertencias de las autoridades francesas sobre posible amenaza terrorista en la región del Magreb, indicaron las mismas fuentes, que lamentaron que esta situación pueda prolongarse «durante los próximos tres meses».

El rotativo marroquí supone que esta situación podría provocar una nueva reorientación de las reservas de invierno del turismo francés hacia otros destinos del Mediterráneo, especialmente España.