Alberto de Mónaco despierta las dudas sobre su estado de salud apareciendo en público con manchas en la cara

Así, el monegasco dejó ver en varias jornadas el buen estado en el que se encontraba, pero una nueva aparición pública ha hecho saltar todas las alarmas de que algo podría no ir bien. El pasado 15 de agosto, en los países europeos se celebraba un acto conmemorativo del 80 aniversario del desembarco de Provenza en la II Guerra Mundial, y la mala cara que presentaba Alberto ha extrañado a todos los asistentes.

Líderes y personalidades se encontraron en el cementerio francés de Boulouris, donde descansan los restos de los soldados caídos en aquella maniobra, para el homenaje. El Presidente de Francia, Emmanuel Macron o el expresidente Nicolas Sarkozy destacaron entre los asistentes, pero quien acaparó todas las miradas fue Alberto de Mónaco por un motivo que no estaba en su mano: el marido de la Princesa Charlène tenía manchas rojas en el rostro que han despertado las dudas de todos.

En lugar de disimular con maquillaje o ocultarlas con algún complemento, el Príncipe se ha mostrado en público con hasta siete manchas rojizas en la frente que le han aparecido repentinamente y que seguro le debieron picar durante todo el acto. Sin conocer todavía el motivo de la reacción, la prensa extranjera ha comenzado a especular para intentar darle una explicación al aspecto del monarca.

El periódico alemán 'Bunte' se ha lanzado a barajar varias posibilidades. «¿Presión arterial alta, picaduras de insectos, lesiones, una reacción alérgica o una quemadura solar?», han formulado acerca de las manchas del Príncipe. A falta de una confirmación oficial de la Casa Real de Mónaco que sirva como respuesta, no es la primera vez que Alberto tiene un problema de este tipo.

En 2014, el de Mónaco se vio en la obligación de someterse a una operación para eliminar de forma preventiva con éxito una mancha benigna que se encontró de repente en la piel. Siete años después, volvió a repetir la cirugía para extirparse otras manchas que le aparecieron en la nariz, la nuca y la frente, donde actualmente le han reaparecido.

La imagen de Alberto de Mónaco no es lo único que ha sorprendido a la prensa de su aparición. Charlène de Mónaco no ha acompañado a quien es su marido desde 2010 en la ceremonia del homenaje. A diferencia de las jornadas de los últimos Juegos Olímpicos donde se dejó ver junto a su familia, ahora parece estar alejada de nuevo de las citas de la agenda oficial pues, es posible que se encuentre disfrutando de unas vacaciones junto a sus hijos mellizos.

Esta desaparición en los actos oficiales vuelve a traer al presente las dudas de si existe o no una crisis en el matrimonio de los Príncipes, que ellos mismos han querido mitigar concediendo entrevistas y desvelando cómo es su relación tantos años después o cómo fueron los inicios de su noviazgo. A lo que no responde la ausencia de ella es a baches de salud, puesto que la sudafricana ya está recuperada de la grave infección que la alejó de Mónaco y de su familia,