Así es Tippi Hedren, musa y víctima de Hitchcock

Hedren ya se había referido a su etapa negra junto a Hitchcock en el pasado, pero no había publicado nada al respecto. Sí aseguró al medio «The New York Times» en una entrevista que el cineasta era un «misógino » y que tenía « un montón de problemas ».

Pese a que fue uno de los rostros más conocidos en los años 60, pocos son los datos que se han publicado sobre esta legendaria intérprete. Nathalie Hedren Kay nació en New Ulm (Minnesota, Estados Unidos) el 19 de enero de 1930.

Comenzó su carrera en el mundo de la moda , desfilando en varias pasarelas de Nueva york . En esta ciudad fue donde conoció a su primer marido, Peter Griffith , en 1952. Cinco años más tarde nació su hija Melanie, pero poco después el matrimonio de rompió y decidió traladarse a California .

Al poco tiempo de llegar fue descubierta por Alfred Hitchcock, quien se empeñó en que protagonizara su película « Los pájaros », por la cual fue galardonada con un Globo de Oro . Pero este no fue su único éxito. Su segunda película, « Marnie, la ladrona », también del mismo cineasta y con Sean Connery de compañero de reparto, mereció una gran ovación. En el rodaje del largometraje se iniciaron las primeras tensiones con Hitchcock.

Tras esta, protagonizó « El gran rugido », la película que cambió su vida por completo. La defensa de los animales y las causas ambientales se convirtieron en algo fundamental para ella. Pese a que continuó su carrera como actriz, las causas benéficas comenzaron a ocupar más hueco en su apretada agenda. Incluso, llegó a recibir varios premios a lo largo de su vida por su labor, como el «Premio Humanitario».

Pero no son los únicos. También ha sido galardonada por su trabajo a la Trayectoria en Francia en el Festival de Beauvais Cinemalia 1994; en España, por la Fundación Municipal De Cine en 1995 y en el Festival Internacional de Cine de Riverside en 2007.; entre otros.

A punto de cumplir sus 87 primaveras , Hedren ha decidido sacar a la luz toda su pasado más oscuro . No era un secreto, más bien todo lo contrario, que el director tenía una obsesión con la intérprete , pero ella nunca había hablado con detalle sobre el tema ni se sospechaba que esto pudiera haber pasado.