Sara Carbonero y su mala racha tras ser operada de cáncer de ovario

Hay un dicho que reza que las desgracias nunca vienen solas. Y, en estos momentos, la periodista Sara Carbonero , esposa del portero internacional español y leyenda en activo de nuestro fútbol Íker Casillas , debe estar pensando que es del todo cierto. La comunicadora ha reconocido que está viviendo «susto» tras «susto» y no es para menos.

El pasado 1 de mayo, mientras entrenaba con el Oporto, su equipo actual, Casillas sufrió un infarto de miocardo , pero tuvo suerte y tras unos días en el hospital consiguió recuperarse. Se ha puesto desde entonces en duda su continuidad o, por el contrario, llevar a cabo una retirada permanente de los terrenos de juego a raíz del accidente vascular. Pero sin tiempo casi para recuperarse de este golpe , a esta familia les ha llegado uno mayor si cabe.

Solo un día después del 38 cumpleaños del guardameta mostoleño, que reconocía que «esta vez, no ha sido un gran cumpleaños », Sara Carbonero anunciaba ayer martes que había sido intervenida de un cáncer de ovario y que tendrá que someterse a tratamiento en los próximos meses.

En un mensaje en su cuenta de la red social Instagram, la periodista explica que el tumor fue detectado en una revisión médica hace unos días, cuando su familia aún no se había recuperado «de un susto», en referencia al infarto que sufrió su marido, Íker Casillas, el pasado 1 de mayo mientras se entrenaba con su equipo, el Oporto, en esa ciudad portuguesa.

«Esta vez me ha tocado a mí, esa dichosa palabra de 6 letras que todavía me cuesta escribir», indica la periodista Sara Carbonero en el texto. Asegura, eso sí, estar «tranquila y con la confianza de que todo va a salir bien». «Afortunadamente lo hemos pillado muy a tiempo pero todavía quedan unos meses de luchas mientras sigo el tratamiento correspondiente», continúa Carbonero, quien pide a sus compañeros de profesión «respeto y comprensión en estos momentos tan difíciles y delicados para mí y mi familia».

La realidad es que Casillas y Carbonero son una pareja muy unida y tienen dos hijos, de 2 y 5 años, por los que luchar con todas sus fuerzas. De hecho, el excapitán del Real Madrid ha querido animar públicamente, a través de las redes sociales, a su mujer, con una frase definitoria: «Un mar tranquilo nunca hizo un buen marinero».