Irina Shayk: «Como buena rusa, me gustan los diamantes y el caviar»

-¿Qué siente cada vez que viene a España?

-Algo muy especial, porque venir aquí me trae muy buenos recuerdos. Debuté como modelo en Barcelona, así que siempre me emociona estar aquí.

-Cuando está lejos, ¿qué echa de menos de este país?

-¡La comida! Todo es muy rico y sano. Y, por supuesto, echo de menos el clima que ustedes tienen y lo acogedores que son los españoles. Tengo muy buenos recuerdos de cuando empecé a trabajar y de lo bien que me trataron.

-Usted reside en una de las ciudades más complicadas del mundo, como es Nueva York, donde la gente no suele aguantar muchos años...

-Nueva York me encanta. Reconozco que no es una ciudad fácil y para algunos puede parecer muy dura, pero me gustan los retos y la energía que se respira allí me anima a superarme. Como buena Capricornio, aprovecho esas situaciones para sacar todas mis fuerzas. Es verdad que en Europa se vive de una forma mas tranquila y añoro ese relax, aunque en el fondo lo que más me pone es la energía que hay en Nueva York.

-¿Le interesa la campaña política que ahora se libra en Estados Unidos de cara a las elecciones presidenciales del mes de noviembre?

-Claro que me interesa, aunque como no soy residente no puedo votar. Por eso no suelo opinar demasiado sobre el asunto. Lo que me parece interesantísimo es la locura de la situación actual, el hecho histórico de haber vivido la era del primer presidente negro y la posibilidad de que ahora tengamos una mujer en la Casa Blanca. Mi apoyo está con Hillary Clinton y sobre Donald Trump, prefiero ni hablar.

-Usted fue la primera modelo rusa que apareció en la portada de la revista «Sports Illustrated». Diez años después, Irina Shayk resulta aún más bella que entonces. ¿Cuál es su secreto?

-No hay secreto, sino trabajo duro y amor por lo que una hace. Creo en el poder femenino, en nuestra independencia, y me esfuerzo mucho en alcanzar mis metas.

-¿Le gustaría echar raíces?

-Es fácil imaginar que el hecho de estar todo el día viajando agota a cualquiera, y más cuando tienes que darlo todo. He cumplido 30 años y reconozco que estoy viviendo un gran momento profesional. No es el momento de parar, aunque sí de frenar un poquito.

-¿Le estresa saber que es la mujer más deseada del mundo?

-Yo me considero una chica normal con un trabajo diferente. Hay situaciones de estrés y momentos en los que me gustaría desaparecer, de no sentirme tan observada por el público. Pero esto es lo que me tira. Cuando empecé en este trabajo, mi ilusión no era convertirme en un personaje famoso, sino aprovechar todas las oportunidades que surgieran para ayudar a mi familia. En los momentos de máxima locura o estrés me centro en los motivos por los que estoy aquí, en los argumentos que me hacen seguir luchando.

-Tengo entendido que para su equilibrio emocional es fundamental la presencia de su madre, que suele reunirse con usted varias veces al año. Es su referente y la persona que le hace tener los pies en la tierra.

-Por supuesto. Lleva en mi casa de Nueva York tres meses y no quiero comprarle el billete de vuelta a su casa, porque soy feliz a su lado. Nos queremos mucho. Recordar mis orígenes es fundamental para no cambiar. Vengo de una familia muy humilde y ellos son los que me hacen sentir no solo amada, sino también una mujer que conoce la vida real y que no pierde la esencia de las cosas. Yo no he cambiado radicalmente, cosa que sí he visto en otras personas cuando alcanzan el éxito.

-Dice que su familia es lo más importante. ¿Sueña con crear la suya propia?

-Claro que sí. Creo que la mujer tiene la suerte de poder concebir otra vida y eso es maravilloso. Mi madre estuvo casada 20 años, mi hermana tiene dos hijos y en el futuro yo también quiero tener mi propia familia. Lo que pasa es que en este momento tengo que seguir aprovechando todas las oportunidades de trabajo que se me presentan como modelo y que me tienen todo el día viajando.

-¿Qué me dice de los rumores que apuntan a su boda con Bradley Cooper?

-Nunca escucho rumores ni me intereso por lo que dicen los demás. Prefiero leer libros o ver reportajes interesantes en la CNN.

-Y a sus 30 años, ¿no le preocupa el avance de su reloj biológico a la hora de ser madre?

-De momento no. Hoy sigo priorizando mi carrera. Aún no tengo la necesidad de plantearme la maternidad por cuestiones de edad.

-¿Mantiene el contacto con Cristiano Ronaldo?

-Nunca hablo de mi vida privada.

-¿Está siguiendo la Eurocopa?

-Repito que sólo me interesan los libros y la CNN.

-¿Qué libro tiene ahora entre manos?

-Me gusta mucho Dostoyevski y, especialmente, uno que se llama «El idiota».

-Como tantos emigrantes, ¿se plantea algún día volver a su tierra para quedarse definitivamente?

-Amo a Rusia y me considero una buena patriota, pero mi vida actual y está en Nueva York. Intento ir dos o tres veces a mi tierra, donde además tengo a mi abuela. Pero hoy por hoy no puedo plantearme regresar, ya que mi carrera está fuera.

-¿Cuál es su plato favorito de la cocina española?

-El jamón, sin duda alguna.

-Ha venido a Madrid a presentar un combinado de whisky con ginger ale, pero yo creía que las rusas bebían vodka.

-No bebo vodka, no me gusta. Prefiero bebidas mas suaves. Pero como buena rusa, sí que me gustan los diamantes y el caviar.

-¿Cuesta despertarse todos los días con el personaje de la súper modelo Irina Shayk incorporado?

-No lo crea, cuando me despierto no tengo esta cara. Cuando me miro al espejo, lo primero que pienso es que me tengo que recomponer, ir al gimnasio y presentar mi mejor imagen. Por las mañanas sólo soy una mujer normal con cara de recién levantada.